Capítulo 91: Caída al abismo

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INTRO

Louis: Nunca confíes en nadie

ZONA ROJA

En los túneles

No había forma, por más que lo intentara era imposible, a cada momento, a cada maldito momento alguien moría aquí, estaba plenamente consciente del estado de los heridos, que estuvieran vivos ya era un milagro, que permanecieran vivos ya era mucho pedir.

El camión se detuvo, bajé del vehículo y vi que habíamos parado al lado de las antiguas salas donde Gentec guardaba a sus monstruos virales, era seguro que al abrir la puerta nos encontraríamos con un monstruo horrible.

Alguien se acercó a abrir la puerta mientras todos los que tenían armas se prepararon para acribillar a lo que fuera que saliera. Lentamente la puerta se abrió haciendo un chirrido muy molesto, siguió hasta quedar completamente abierta y... Todo dentro era oscuridad, no se veía absolutamente nada.

Tania: Muy bien señores, los que tengan un arma seguirme, los demás permanecer aquí afuera, cerrar la puerta después de que entremos y escuchen lo que escuchen no abran hasta que alguien golpee la puerta desde adentro en dos intervalos de tres golpes cada uno

Los que permanecían armados la siguieron a esa oscuridad, vi como la puerta se cerró detrás de ellos, iba a volver al camión para ver a los heridos, pero... no pasaron ni diez segundos, ni diez malditos segundos, y desde dentro de esa sala se oyeron disparos, gritos, maldiciones, pedidos de ayuda, más gritos y maldiciones, lo último que se oyeron fueron gruñidos y por ultimo un silencio sepulcral.

Quede en shock con todo eso, y creo que no fui el único, no sé cuánto tiempo pase en trance, lo que me devolvió a la realidad fueron los intervalos de tres golpes provenientes desde adentro, la puerta se abrió nuevamente, y se veía una sala completamente iluminada.

Ryan: (saliendo de la sala) Muy bien, no hay forma de que los vehículos entren aquí, si son unos torpes sin remedio háganse a un lado, aquellos que tengan algo de delicadeza ayuden a los heridos a entrar.

Algunas personas se hicieron a un lado, los demás fuimos al camión y llevamos a los heridos dentro de la sala, Pude ver dentro de esa habitación un cumulo de cadáveres de gente y de infectados normales amontonados en un rincón, demonios, como si nuestro número no fuera ya escaso más gente tuvo que morir aquí dentro.

Y entonces paso algo que hizo que las palabras del capitán resonaran en mi cabeza. Dos personas llevaban a una joven a la sala, uno la agarraba de los brazos y el otro de las piernas, ¡cuando la chica se partió en dos hay mismo! Ella grito de dolor unos breves segundos antes de quedar inmóvil en los brazos de esas personas, bueno de hecho antes de que las dos mitades de su cuerpo quedaran inmóviles.

Ryan: ¡Joder! Ustedes dos no tienen ni puta de idea de delicadeza, lleven ese cadáver con los demás y después ¡Háganse a un lado malditos cabrones estúpidos!

El cuerpo partido de la chica fue dejado junto con el resto de cuerpos despedazados que había, pero de la nada uno de los cadáveres de infectados se movió y le encajo los dientes a uno de esos dos individuos. Uno de los guardias líquido a ese infectado, y la persona a quien mordió ese infectado, pues...

¿? 1: Estoy bien, estoy...

Y una bala le atravesó el cráneo dándole una muerte instantánea, no puedo decir que no era de esperarse, pero al menos creí que le darían unos momentos para prepararse para su inminente muerte, a veces olvido la clase de personas con las que estoy, pero la verdad... no los culpo. Oí una voz que me saco de mi nuevo trance

PROTOTYPE INFINITIXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora