Capítulo II

5.3K 377 64
                                    

5 VOTOS Y SUBO NUEVO ¡QUE LO DISFRUTEN!✨

–K☕


Maia Rose

Trágame tierra.

Es lo único que puedo pensar.

Fui muy atrevida con mi jefe esta mañana, que pequeño es el mundo enserio.

Tomo una respiración profunda, puedo manejarlo, no dejaré que me intimide.

Recupero mi postura, no sé por cuánto tiempo nos hemos visto directamente a los ojos, es muy atractivo, y debo admitir que el tatuaje que se asoma por su cuello no le queda nada mal. No sé exactamente qué es, pero me intriga.

—Disfrutando la vista eh— Mi jefe pronuncia divertido.

Decido no hacer caso a su comentario y Luke nos mira extraño.

—Neil te presento a mi

Interrumpo a Luke, mi jefe no tiene que saber sobre mi vida privada, muy apenas si lo conozco.

—Maia Rose, residente quirúrgica, un honor ser parte de su equipo— Estiro mi mano esperando que la estreche sin embargo no recibo respuesta.

—Vaya que arrogante y grosero me saliste Meléndez—Digo en español y en voz baja.

—Lo sé y por eso soy uno de los mejores— Me contesta en el mismo idioma lo cual me deja sorprendida. Quiero disculparme, pero él no me deja.

—Tranquila, nada que no me hayan dicho antes Rose, veo que no leíste los documentos de tu carpeta con anticipación, ahí claramente dice que tengo raíces mexicanas debes de ser más cuidadosa con tus comentarios— Sé que lo dice enserio, pero su sonrisa divertida no se ha ido.

—Lo siento mucho de verdad no quise ser grosera doctor— Suelto honesta.

—Tranquila, estamos a mano— Me guiña el ojo.

Le sonrío mostrando mis dientes y el me la regresa de la misma manera.

—Vaya vaya, química en el aire eh, pero adivina qué, es mi exnovia y conoces el código de amigos— Luke comenta serio y yo no sé qué decir.

La sonrisa de Neil se desvanece rápidamente y su semblante cambia a ¿Molesto?

Se voltea rápidamente y comienza a caminar.

—Necesito que vallas al laboratorio por los estudios del paciente 101 te espero en mi oficina y rápido— Suelta en tono frío.

—Muchas gracias idiota— Le digo a Luke, mientras voy al laboratorio dejándolo atrás.

Y yo que pensé que habíamos empezado con el pie derecho.

Neil Meléndez.

No sé porque estoy molesto, su vida personal no es de mi incumbencia nuestra relación es estrictamente profesional y hasta ahí.

Estás celoso Neil acéptalo.

Lo que me pregunto es porque, si la conocí esta mañana.

Noto que Rose viene apresurada a mi oficina, ni siquiera me pide permiso para entrar.

Vaya que está llena de sorpresas.

—Necesita un Baipás Coronario con urgencia jefe— Me muestra los estudios y efectivamente, necesitamos hacer la cirugía lo antes posible.

𝐍𝐄𝐈𝐋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora