Capítulo XII

2.8K 224 58
                                    


Hey ¡Al fin un capítulo nuevo! ❤️

La universidad me tiene atrapada, hoy estuve en llamada desde las 9 a las 4 🥺

¿Cómo van ustedes con sus clases virtuales?
Espero que le estén echando muchas ganas ✨

Bueno disfruten y ya saben que pueden darme una estrellita si les gusta.❤️

-K ☕




Neil Meléndez

Siento como algo toca suavemente mi piel, en mi tatuaje para ser exactos; me gusta esa sensación tanto como para seguir con los ojos cerrados.

Desde que conocí a Maia había notado que siempre miraba lo poco se asomaba de tinta en mi cuello.

Algún día le diré que significa, por ahora no me siento listo.

Siento un pequeño beso en mi cuello, aún sobre el tatuaje y trato de no sonreír para que no note que ya estoy despierto hace unos minutos, pero por dentro estoy que no me la acabo.

La noche con Maia fue diferente, fue tan mágica.

Y no lo digo porque haya ocurrido algo sexualmente, si no porque me sentía en paz; en completa confianza y pude descansar como hace mucho no lo hacía

-Me encanta tu tatuaje enserio- Escucho decir a Maia para después voltearse y seguir durmiendo.

La envidio un poco ya que yo tengo junta médica por el caso delicado de la mujer embarazada y ella puede dormir por lo menos dos horas más.

-Y a mí me encantas tú Maia Rose...

Me estoy preparando mentalmente para levantarme en cuestión de minutos y dejar a esta bella dama.

....

Estaba dispuesto a irme, pero noté que a Maia le llegó su periodo así que estoy esperando a que se caliente el agua para llevarle un té, no tengo idea de que es lo que siente, pero supongo que los cólicos no son nada amigables el primer día.

Recuerdo que mis ex novias decían que sentían un dolor tan intenso y estaban de un humor insoportable, pero por Maia estoy dispuesto a que me diga lo que quiera de todas formas ya estoy algo acostumbrado a que me insulte de vez en cuando.

Mientras voy a la ducha y me aseguro que el agua esté a una temperatura agradable para que tome un baño cuando despierte. Debo admitir que duerme como roca, no ha escuchado ningún movimiento de los que he hecho, pero está bien mejor para mí.

De regreso a la cocina preparo el té para Maia y me dirijo a su cuarto; me gustaría buscarle ropa limpia pero la verdad solo me he quedado dos noches aquí y no se donde guarda sus pijamas y esas cosas.

Dejo el té en su mesita de noche y la muevo un poco; pero noto que no se despierta; me tengo que ir ya o se me hará tarde.

Opto por conectar su celular a su bocina y dejar una alarma en cinco minutos para poder salir libremente pero antes le dejé una pequeña nota junto a la taza.

Le doy un pequeño beso en su frente y me voy de ahí; tengo que ir a casa a arreglarme e ir a enfrentar el desastre que hay en el hospital.

Presiento que sea un largo día.


Maia Rose.

¡Puta madre! Esto duele como el infierno.

Es lo primero que pienso cuando comienzo a despertar por una alarma terriblemente fuerte.

𝐍𝐄𝐈𝐋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora