Capítulo 14

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Confesiones a una madre II

-Hago lo mismo que hizo Blanca ¿No joven?

-Si señora, simplemente relate lo que desea...

-OH! Muchísimas gracias...

Amiguitas les habla nada más ni nada menos que Alexandra Von Uckermann, así es la madre de Christopher, hoy me toco a mi proseguir con la historia de estos jóvenes, comencemos..

-¡¡Maaaaa llegue!!-grito anunciándose Chris mientras dejaba las llaves sobre una pequeña mesa que había al lado de la puerta y se dirigía hacia la cocina donde me encontraba yo preparando la comida...

Eleve mi mirada para verlo, era tan hermoso mi hijo, la verdad nunca en la vida estuve tan agradecida como lo estuve aquel veintiuno de octubre, cuando de mi salio aquella personita que tiene hoy en día veintidós años, alto, con un físico recientemente trabajado, un cabello despeinado y desprolijo como le gusta, una barba que lleva un día en su rostro, unos ojos cafés tan profundos como su alma, una sonrisa tan blanca y resplandeciente como la luz del sol a primera hora del día y vestido con una ropa deportiva que le sentaba de primera..

-¿Cómo estuvo el ejercicio?-le pregunte luego de besarlo en la mejilla y volverme a concentrar en la comida que andaba preparando...

El escondió su rostro en el refrigerador y salio de el con una botella de jugo en una mano y en otra un pedazo de queso, dejo ambas cosas sobre la barra americana que adornaba mi cocina y se sentó en una silla que se acerco...

-Bien, como siempre, corrí las treinta cuadras que me dijo el entrenador y ya luego me fui caminando a paso rápido hacia el gym donde hice la rutina de siempre...-me dijo mientras se comía aquel trozo de queso...

-Pero cuidarse con la comida nunca, ¿verdad?-le pregunte sonriendo...

Chris me sonrío de igual forma...- Me conoces demasiado bien, ¿alguna novedad? ¿El jefe? ¿José? ¿Donde se metió mi familia?-me pregunto haciéndose el angustiado pues esperaba ver a su padre y hermano que estaban de visita...

Deje la cuchara con la cual revolvía la salsa que había preparado y me dirigí hacia otra sartén para echar la cebolla al aceite...

-Tu padre fue a casa de Don Eduardo a jugar el póker, es su "noche de machos", tu hermano ha salido con Liliana, hoy cumplían aniversario así que no viene a dormir y solamente estamos nosotros dos y esta deliciosa comida que estoy preparando- me limpie las manos con un repasador y parándome al lado de mi hijo la pregunte-¿Por qué no invitas a Dul a comer?

-Mmm no, esta en Taclo grabando, pero si no, no te cabe la menor duda que ya la hubiera invitado...

-Lo sé cariño...-le pellizque una de sus mejillas y volví a mi labor de ama de casa...-Ahora vete a dar una ducha, que pronto va a estar la cena...

Chris se bajo del taburete y caminando hacia las escaleras dejo escapar un suspiro enorme y subió unos dos escalones me grito...

-¡¡Maaaa sabes algo!!

-¿Qué?-le pregunte mirándolo divertido...

Christopher se apoyo en la baranda de la escalera y con la sonrisa más boba que nunca le vi en su rostro me confeso...

¿Cómo gritar que te amo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora