muslos. ||JinNam.

VII.

Seokjin despertó cuando el sol golpeaba con su rostro, y su reflejo fue bufar. Miró a su pareja aún dormida, sonriendo al ver su espalda Morena contrastar con el sol, su bronceado perfecto deslumbrar, su espalda llena de pequeños besos y mordidas además de chupones.

lo miró removerse, y solo pudo dedicarle una sonrisa, cuál Namjoon respondió aún adormilado.

—buenos días, Jinnie.

saludó el muchacho, buscando el calor en los brazos de su pareja, a pesar de ser verano. Definitivamente elegir Italia como lugar turístico para la luna de miel fue buena idea.

—príncipe.

murmuró Seokjin recibiendo a su esposo entre sus brazos, besando su desnuda piel. En esas noches de calor, amaban unir sus cuerpos entre palabras amorosas, o fetiches extraños. después de todo, ahora eran esposos.

—¿te gusta este hotel? ¿cómo dormiste?

preguntó Seokjin, haciendo que Nam soltara una risita. Habían decidido explorar dos lugares de italia, por lo tanto se habían quedado en un hotel primero y luego en otro. Namjoon asintió.

—me gusta mucho la vista. Ya quiero recorrer el Coliseo de Roma o andar por algún barco. ¡estoy muy emocionado! tanta espera valió la pena, Seokjinnie.

Jin asintió, feliz también.

...

—¡una foto, Namjoon!

Seokjin enfocó su cámara en su esposo cuál le sonrió emocionado. posó de distintas formas, luego ambos rieron y se acercaron para mirar las fotos.

—deja las últimas dos, en la otra me veo gordito.

Susurró nam apenado, entrelazando sus deditos de la mano izquierda con los de la derecha del mayor. Seokjin lo miró, y le besó la mejilla, cosa que le causó una sonrisa.

—siempre estas lindo Namjoon. Eres lo más hermoso que he visto en mi vida.

Namjoon rió sonrojado, con una idea cruzando por su mente. tomó la cámara que tenía Seokjin en la mano y corrió hacia una pareja de señores, pidiendo si les podían sacar una foto. Se veían de confianza.

Nam volvió con Jin, y besó su mejilla sintiendo el sonido de la cámara. Jin lo miró aún algo aturdido, todo había pasado demasiado rápido. De seguro su rostro de sorpresa saldría en la foto.

Rodeó a su moreno por la cintura, y ambos agradecieron a los señores para tomar la cámara y seguir caminando hacia el Coliseo Romano.

—creo que Italia fue la mejor opción, estoy muy emocionado, y pues, no lo sé. ¡es tan bonito! me encantan los edificios romanos o lo lindo que se ve este río rodeando la ciudad.

ambos rieron, se amaban.

....