❝ Celo la lluvia que recorre tu rostro, celo la brisa que mueve tus ropajes y celo el como eres feliz sin mi, Shinobu Kocho. ❞
Kyojuro y Shinobu tienen una relación de amantes en secreto de todos los pilares y el actual novio de la muchacha; Tomi...
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ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏᴄᴜᴀᴛʀᴏ
𝐅𝐫𝐮𝐭𝐨
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Shinobu Kocho estaba destrozada.
Fue tan ciega por su descuidada confianza, a pesar de que aquel hombre de terminaciones rojizas no era su pareja en el fondo sintió que le habían arrancado parte de su piel.
Dicen que a pesar de los sentimientos o situaciones, una vez que dos personas se unían en un acto carnal parte de si quedaba impregnada en el cuerpo, mente e incluso alma del otro.
La de cabellos purpuras no lograba controlar la danza errática de lágrimas que bajaba por sus mejillas porcelanas, su nariz estaba roja y la cabeza le daba mil giros cuando los cuervos avisaron la fatídica noticia que rápidamente se esparció de boca en boca como cenizas.
Kyojuro Rengoku, a la edad de 20 años había dejado atrás a la esforzada organización, sus amigos, familia y un hijo que jamas conocería.
Porque para la pésima suerte de la reconocida pilar del insecto, un fruto crecía en su vientre.
¿Y cómo sabía ella qué era del rubio y no de su pareja? Sencillo, Shinobu Kocho y Tomioka Giyuu en sus largos meses de relación jamás habían compartido la misma cama.
— Esto no me puede estar pasando a mi...—sollozo con un tono errático.
A pesar de qué ya habían pasado varios días desde que fue anunciada la muerte del pilar de la llama e incluso ya los pilares y cercanos habían asistido a su funeral, la fémina no lograba asimilar lo que estaba pasando en su vida.
