VIII

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Una mujer de edad semejante al azabache daba instrucciones en el salón, que la pequeña Haruno observaba con brillo y asombró en los ojos, de seguro era la dueña del lugar, ambos se acercaron a ella para hablar sobre la inscripción 

— Hola, disculpe — habló la peli negra llamando la atención de la morena que daba las instrucciones 

— Oh, Hola linda ¿Puedo ayudarte en algo? — dijo con amabilidad mirando a la pequeña niña y luego observo al mayor que la acompañaba mirándolo de arriba y abajo, formando en su rostro una mueca de molestia acercándose a él para estrechar su mano 

— Hola — dijo soltándose las manos — Creo que la dejare aquí y vendré por ella a las 7 ¿Le parece? — dijo arrogante el oji onix cosa que no sorprendió a menor; sonriendo le a la mujer con esas típica sonrisa que derrite a cualquiera a excepción de ella 

— ¿Disculpe? — dijo con indignación — Señor.... 

— Sasuske 

—  Mire señor Sasuske, no somos una guardería; somos una escuela de ballet y nos tomamos muy en serio la participación y atención de los padres en respecto a sus hijos — exclamo con cierto tono de enojo 

El deportista se sorprendió por las palabras de la mujer que tenía enfrente, se dio cuenta que sería difícil de convencer 

— Tal vez no me estés entendiendo linda — dijo con voz seductora a la oji miel — ¿Acaso no sabes quién soy? Soy Uchiha, Sasuske Uchiha, él que nunca dice no, el numero uno en el juego y en tu corazón — dicho esto le guiño el ojo a la pelirroja haciendo poses de revista 

La mujer rió algo sardónica  y negó con la cabeza, saber cosa alguna del tal Sasiski 

— ¿Usted no sabe quien soy? 

— No 

— Mi nombre es Karui Akimichi, la maestra de danza y dueña de esta escuela señor Uchiha, y si quiere inscribir a su hija tendrá que ser dentro de siete meses, acabamos de cerrar las inscripciones hace dos semanas, pero le agradezco el haber venido — le explico 

— ¿Siete meses? no puedo esperar tanto, daré mas dinero si es necesario — agrego el hombre algo desesperado e intentando persuadir a la mujer con un soborno 

— Lo lamento, pero para entrar a la escuela se tiene que hacer un casting y en serio que había muchas niñas como la suya y muchos padres con dinero — dijo dándole la espalda para irse con el grupo de niñas — Además de que necesito saber si su hija tiene lo necesario y darle a ella una oportunidad causaría conflictos, muchas otras esperan entrar, espero lo entienda señor Sasuske— finalizo la mujer dispuesta a seguir con su clase 

Pero en eso ambos adultos miraron como la pequeña seguía los pasos que hacían las bailarinas mayores, haciendo giros perfectos a lo igual que su postura.  La pelirroja sorprendida por la habilidad de la linda azabache, se acercó a ella; por otro lado el Uchiha miraba sonriendo de manera orgullosa, claro que su hija tenía lo necesario era talentosa después de todo era hija de él y Sakura, era claro que la aceptaría sin necesidad de un tonto casting. 

— Cariño ¿Que te parece si te cambias y vienes a practicar te parece? — los ojos de la pequeña se abrieron de sorpresa y alegría, asintió con la cabeza a su nueva maestra de ballet — Mi hija Chouchou puede llevarte a los vestidores — en eso se acerco una chica de su edad con un voluptuoso cuerpo saliendo del grupo de bailarinas con la misma tonalidad de piel que la mayor y ojos miel con cabellera naranja terrosa y la guió tras los bastidores. 

Ambos adultos vieron que se llevarían bien por lo que parecía, la mujer volvió hacia el futbolista dejando le un formulario que debía de llenar, explicándole la colaboración que tendría con la escuela y este acepto cada cosa sin poner atención. 

Entrenando a Papá {SASUSAKU}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora