XI

194 25 9
                                    

Narrador Omnisciente

— ¡Atención! — hablo fuertemente el azabache al equipo — Bien — inmediatamente todos estaban cerca de él formando un circulo — Nos dicen que nos darán vacaciones ¿Pero quiénes irán de pesca?

—  ¡Ellos! —  respondieron a coro todos los varones del equipo 

— ¿Quiénes irán de visita con su suegra? —  grito de igual forma 

— ¡Ellos! 

— ¿Quiénes ganarán el campeonato? 

— ¡Ellos! —  grito el rubio emocionado 

En ese instante todos sus compañeros lo miraron con caras muy serias, incluyendo a Sai quien llevo su mano hasta su frente sintiendo pena por la inocencia/estupidez de su amigo. 

— ¿Nosotros? —  susurro con bochorno y confusión esperando no cometer otro error

— ¡NOSOTROS! —  grito el equipo dispersándose 

Los compañeros de Sasuke corrían yardas y daban saltos por la cancha, mientras el platicaba con otros compañeros discutiendo las nuevas estrategias 

Una pequeña niña estaba sentada en las bancas cerca, se le veía muy triste. Las palabras de la mujer se quedaron en su mente, quizás por eso Sasuke no la quiso, ¿Era un molestia? Por eso la dejo a ella y a su madre.

El azabache notaba la situación entre el y la menor, no habían cruzado palabra del tema de la pelirroja, alegría con la que llego la niña desapareció en ese instante y no sabia como solucionarlo. 

Jugo se encontraba moviendo una colcha de color rojo que se mantenía de pie, donde su objetivo era empujarla lo más lejos posible; lo cual le ayudaba a empujar o teclear a la persona del equipo contrario en algún momento del partido. 

Notaba extraño a la pequeña, por lo que la coloco delante de él y la empujó sin mucha fuerza, llegando al lugar donde la azabache con lentes los miraba entrenar.

— Bien, es turno linda —  le hablo captando su atención, algo confundida accedió y se puso enfrente para mover la gran colcha roja, lista para empujarla

— ¡Esta bien! —  dijo cambiando su semblante, uso sus manos y empujo, la colcha no se movió se posiciono de espaldas a esta y continuo empujando con todas sus fuerzas, pero no logro molerlo ni un solo centímetro

Bajo su cabeza, en serio quería lograrlo, quería ser igual o mas fuerte que su madre y ahora también mas que él, algo decepcionada camino hasta el peli naranja 

— No puedo hacerlo —  dijo tristemente —  mis brazos son muy débiles 

— Por su puesto que no — le dijo agachándose a su altura —  La fuerza la tienes aquí — señalo su corazón — tienes que creer en ti misma pequeña 

La pequeña de tez blanquecina sonrió de oreja a oreja feliz, lo intentaría una y otra vez hasta conseguirlo, se quito sus lentes y los dejo en la banca. Jugo pinto en sus mejillas unas lineas negras dándole mas ánimos a la oji oscuro.

— ¿Lista Sarada? — pregunto el rubio al verla 

—  Más que lista —  sonrió entusiasmada

Junto toda la fuerza que podía y coloco sus manos de nuevo en la colcha y empujo, dando su mayor esfuerzo la colcha se movió de su lugar  y la pequeña no dejaba de empujar y no podía creérselo; ne verdad lo estaba logrando 

De repente  pasaron por donde se encontraba el resto del equipo, que estaba escuchando la futura jugada. 

Un fuerte sentimiento llego a la menor, estaba contenta que no pudo evitar gritarle par que la viera y así reconociera su fuerza y talento 

Entrenando a Papá {SASUSAKU}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora