Semen Up - yoonmin

•CAPÍTULO 9•

—¡No puedes hacerme esto!

Jihyo lo mira, mientras le da un mordisco a su pastelito y se encoge de hombros.

—Puedes irte, no te estoy atando. Si no quieres, está bien. —Ella le sonríe con simpatía, como dándole a entender que no se enojará.

Pero ese es el menor problema.

—No puedo irme, tenemos ese descuento de dos por uno, ¿recuerdas? No traje el suficiente dinero para un boleto de avión. Dijimos que yo pagaría el de ida y tú el vuelo de regreso. —él alza una ceja y ella cierra los ojos por un momento, recordando.

—¡Cierto! Bien, bien. Quizás te puedas ir en... ¿Podríamos llamar a mi padre? Pero realmente me gustaría que te quedes, —Jihyo desliza suavemente—La pasaremos bien, te lo prometo. Sólo ignora la presencia de Jungkook.

—¿Cómo puedes proponerme semejante mierda? ¡No pienso vivir con un imbécil porque tú quieres quedarte más tiempo aquí! —él puntualiza con el dedo índice golpeando la mesa. Un pedazo de gente los observa pero ambos los ignoran.

—Sólo será unos días, no te hagas mala sangre. —ella se muerde el labio,esperando el grito de Jimin.

Pero éste se queda mirando hacia la puerta donde Yoongi entra. Éste no lo ve, se mira apurado, yendo al mostrador y hablando con la cajera, luego de unos pocos segundos recibiendo un pedido y entonces cobra y se va.

Jimin piensa en la noche anterior y en el beso y él sólo quiere repetirlo. Entonces recuerda que Jihyo está ahí, esperando una respuesta. Él la mira y ella está alzando una ceja, su cuerpo corrido hacia un costado. Obviamente ella se dio cuenta que Jimin se había concentrado en algo... alguien.

—No lo sé...

—Por favor, Jimin. Le diré a Jeongyeon que le pida a su hermano que no te moleste y que intente no cruzarse en tu camino. ¿Bien?

—¿Cuánto tiempo?

—Los que quiera. —ella se encoge de hombros. Jimin la mira inquisitivo mientras busca su billetera—¿Ya te vas? ¿No iremos a pasear?

—¿Cuánto tiempo quieres quedarte entonces? —pregunta, esquivando él cuestionamiento de ella.

—Tengo que pensarlo.

—¿Sólo tú, eh? Qué considerada. —se levanta y deja los billetes en la mesa.

—Jimin, no te enojes por esto, ¡no estoy tratando de provocarte, quiero pasarla bien!

—Hazlo, no te detengo, pero me hubiera gustado que lo decidamos juntos. —él susurra, sus ojos mirando hacia la calle, directo a la playa.

—Lo estamos haciendo ahora, diablos.

Él niega con la cabeza. —No, tú ya tomaste una decisión y a mi me empujas en ella. Adiós.

Mientras se aleja escucha a Jiyoon exclamar un "¡Jimin! ¿Vas a quedarte o no?" pero no le responde.

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Sabe que actúa como un tonto pero no puede evitar sentirse un tanto molesto porque su amiga haya decidido pasar los siguientes días en casa de los Jeon, desde mañana, claro, cuando la semana en el pequeño apartamento se haya cumplido. Ella conoce toda la historia con Jungkook, por eso le duele tanto.

—Hola... —susurra, una vez en el kiosko de Yoongi frente a él.

—No. —Yoongi se ve serio y Jimin no entiende porqué. Bueno, tal vez se arrepiente del beso o algo así.

—¿No?

—No. ¿Puedes irte? Tengo trabajo y siempre consigues que mi jefe me dé sermones.

El estómago de Jimin cae ante esas palabras. ¿Lo está alejando?