Capitulo 5

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Seré honesta, me sorprendí cuando desperté. Estaba segura de que estaba muerta. Cuando desperté, rápidamente miré a mi alrededor para ver si alguien estaba cerca de mí, y nadie lo estaba. La mayoría de mis cosas también se habrían ido. Todo lo que quedaba era mi cuadernillo, un encendedor, mis dos pistolas y algunas balas extra. Luego me evalúo rápidamente, para ver si algo estaba roto. Aparte de que mi rodilla estaba adolorida y algunos golpes y contusiones, estaba bastante bien.

Me levante agarrando mis cosas. Miro arriba y veo como el gorila se alejaba. Suspiro y empiezo a vagar por la isla. Aquí es donde me alegro que mi padre me haya enseñado como sobrevivir en casos como este.

Mientras más caminaba más me asombraba. Es uno de los lugares más hermosos en los que he estado. Ahora admito que no he estado en muchos lugares. Principalmente ayudé en un montón de zoológicos en todo Estados Unidos y luego en Tailandia.

Después de un rato, puede escuchar a Slivko hablar por el radio. Me reí entre dientes. Tendré que hablar con ese chico para que baje la voz. Me dirigí hacia donde provenía la voz.

"Están todos en tierra, todos". Escuche la voz de Conrad. Solté un suspiro de alivio, sabiendo que estaba bien. Cuando llegué al claro, fui recibida por Conrad y Slivko apuntándome con sus armas. Levanto mis manos y les sonrío.

"Solo soy yo muchachos, pueden bajar las armas". Slivko sonrío al verme, mientras Conrad parecía aliviado, probablemente porque alguien más sobrevivió.

"¿Estas bien?" Me pregunta Conrad mientras se acerca a mí. Asiento con la cabeza.

"Se me soltó el cinturón de seguridad y caí. Aparte de que me duele la rodilla y algunos golpes estoy bien". El me sonríe.

"Bien". Se vuelve hacia todos. Noté que Mason, Brooks, San y Nieves también estaban allí. "Estamos en el lado sur de la isla, hay un río a un par de kilómetros de aquí".

"Si nos quedamos por la orilla, debemos llegar al lado norte". Yo hable y Conrad me miró sorprendido.

"Debería estar sentado en un escritorio". Murmura Nieves para si mismo.

"Entonces, esperen, ¿no vamos a hablar de esto?". Slivko pregunta, ligeramente asustado.

"Deberíamos dirigiéndonos al norte, recogiendo cualquier otra persona que encontremos". Les informo a todos los demás.

"¿Estas bien?" Conrad le pregunta a Mason, quien parece estar aturdida.

"No sé como contestar esa pregunta en este momento".

"Yo tampoco sé que fue eso".

"Con suerte, espero que valgan el dinero que les pagaron a ambos".

"¿Realmente no vamos a hablar de eso?". Me enfrento a Slivko, agarrándolo por los hombros.

"Slivko, ya, sucedió ¿okey? Hablar de eso no nos va a sacar de esta isla más rápido. Así que necesitas calmarte". Me mira y asiente con la cabeza muy rápido. Volteo hacia los demás. "Ahora empecemos. Cuanto antes nos pongamos en marcha, mejor". Slivko trató de entregarme un rifle pero me negué.

Todos comenzamos a dirigirnos hacia el río, Conrad y yo al frente. Cojeaba ligueramente debido a mi rodilla, pero avanzaba bastante bien.

Podía sentir que mis emociones intentaban abrumarme, quiero decir, quién no se volvería loco después de ser atacado por un gorila del tamaño de un edificio y estrellarse en una isla que ni siquiera se conoce. Me enseñaron a mantener a raya mis emociones, para que tu mente pueda pensar con claridad, gracias papá.

Noté que Conrad seguía mirándome. Estoy bastante segura de que no me creía que yo fuera rastreadora hasta ahora. Era muy lindo la forma en que se aseguraba de que estuviera bien.

"Se llama la teoría de la Tierra Hueca. Randa me contrató porque escribí un documento que lo confirmaba, lo que la mayoría de la gente piensa que es una idea descabellada. Que existen estos espacios subterráneos masivos aislados del mundo de la superficie". Brooks nos informó. Realmente no me importó, pero superó el silencio total.

"Pasadizos. Randa creía que esta isla podría ser una de esas". Dice San.

"Un punto de emergencia para lo que sea que viva debajo. Especies antiguas como lo que acabamos de ver". Finalmente estamos fuera de la jungla, caminando a través de una hierba alta, más alta que Conrad, apenas. "Pensé que estaba loco". Me río y miro a Brooks.

"Todavía creo que está loco, pero por otras razones". Conrad me mira con una sonrisa en su rostro.

"Ella estaba muy en contra de que el arrojara las bombas". Dice Conrad.

"¿Cómo se suponía que supiéramos que un gorila gigante nos atacaría?". Pongo los ojos en blanco.

"No pero le dije que los animales atacarían, y tenia razón". Hubo silencio por unos momentos, hasta que Slivko comenzó a usar la radio nuevamente, sin respuesta.

"Estamos fuera de alcance, Slivko". Conrad le informa. "Guárdalo para cuando nos acerquemos al grupo". Miro el río que finalmente llegamos. Era hermoso. El agua estaba bastante clara y las aves que había en ella parecían pájaros que había visto en zoológicos. Era bastante pacífico, considerando las circunstancias.

Luego escuchamos un sonido que hace que todos se vuelvan hacia el río, de donde salía una criatura enorme. Parecía un enorme búfalo de agua cubierto de follaje de agua. Estaba caminando hacia nosotros. Slivko y Conrad apuntaron instantáneamente allí con sus armas, mientras yo alcanzaba la mía.

Mientras observaba al animal, me di cuenta de que a menos que hiciéramos algo para asustarlo, estábamos a salvo. Conrad debe haberse dado cuenta de lo mismo porque bajó su arma. Slivko todavía parecía que podía disparar en cualquier momento.

"Nadie se mueva". Digo lo más calmada posible. Empiezo a caminar lentamente hacia el animal, que ahora me mira con cuidado.

"Bien". Pongo mi mano detrás de mi mientras me acerco. Estiro la mano frente a el mostrando que no soy una amenaza para ella. Ahora estaba lo suficiente mente cerca como para sentir su aliento un mi cara. Sonrío mientras acaricio su nariz. Resopló, y luego se dio la vuelta alejándose de nosotros.

"Eso fue asombroso". Slivko dice mientras me doy la vuelta.

"Ese es mi trabajo, para eso me contrataron. Ahora sigamos moviéndonos". Todos comenzamos a movernos de nuevo cuando Conrad camina justo a mi lado.

"¿Desde cuándo los etólogos llevan armas?". Me pregunta, lo miro y sonrío.

"Nunca se sabe cuando un animal tiene rabia o atacara, tengo que poder protegerme". El se ríe y sacude la cabeza.

"Más sorpresas, Matthews". Le sonrío.

"No tienes idea".

Kong || Always Surprice Me - James ConradDonde viven las historias. Descúbrelo ahora