Dos.

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La familia Villalpando.

Era una familia muy unida. Martín y Columba; un gran cantante y una gran artista, hacía unas pinturas increíbles.

Martín y Columba son los padres de 3 hijos; Alonso, Camila y Diego. 

Alonso es el Mayor, le sigue Camila y el más pequeño es Diego.  El pequeño Alonso tenía 8 años, Camila 5 y Diego 2.

Alonso era el único de los tres hermanos al que le encantaba pintar igual que su madre, mientras Camila y Diego a pesar de ser muy pequeños, mostraban interés por la música.

Alan, el mejor amigo de los hermanos Villalpando, pero la verdad es que, se entiende más con Alonso. Pues, son casi de la edad y les gustan cosas similares. Alan tiene 9 años, es un chico muy agradable.

Los padres de Alan se llevan muy bien con la familia Villalpando ya que, su padre, al igual que el padre de Alonso, es cantante. 



Esa tarde lluviosa, la familia Villalpando tenía una comida a la cual los padres de Alan habían sido invitados; obviamente Alan y su hermana Karen estaban ahí.

-Esos chicos saben como divertirse.-Dijo Martín mientras veía como sus hijos y los de su gran amigo Sergio jugaban bajo la lluvia.

-Eso parece, sólo espero que no se enfermen.-Comentó Sergio.

Todo iba muy bien, pero de repente Alan se puso triste, se apartó de todos y Alonso lo notó y se acercó hasta donde estaba sentado.

-¿Qué tienes?-Preguntó triste.

-Nos vamos, Alon. Mis papás decidieron que nos mudaremos a Canadá, me dijeron que no te dijera nada, pero no aguanto. 

Alonso se sentía triste ahora, su mejor amigo no se podía ir. ¿Ahora con quién iba a jugar todas las tardes? ¿Con quién se juntaría en la escuela?

Los padres de Alan le contaban a los papás de Alonso sobre su mudanza a Canadá, todos sabían que a sus hijos les iba a ser muy difícil esto, pero Columba esperaba que Alonso, Camila y Diego se llevaran bien con los hijos de su amiga Mariana que, estaba a punto de mudarse cerca de ahí. Así, sus hijos tendrían con quien jugar.



La comida acabó y todos se preparaban para dormir ya. Columba decidió ir a la habitación de Alonso, pues estaba muy triste y no era para menos, su único amigo se iba del país.

-Cariño, ¿por qué estás tan triste?-Tomó asiento en la cama de su hijo, quien estaba sentado en esta.

-Alan se va de aquí y ya no lo voy a ver.-Sin más, comenzó a llorar y abrazó a su mamá.

-Sé que se va y que te sientes mal por eso, pero en algún momento volverás a verlo, ya verás. A parte, te tengo una buena noticia.-Decía mientras acariciaba el cabello de su hijo.

-¿Cuál?-Se separó del abrazo.

-Una vieja amiga se mudará cerca de aquí y ella tiene hijos, pueden ser buenos amigos.

-No. -Se acostó y se cobijó hasta la cabeza rápidamente.

-Bien, te dejaré por hoy. Descansa, te amo.-Se levantó y caminó hasta la puerta, se quedó ahí unos momentos viendo hasta donde estaba Alonso. Salió y cerró la puerta.

No le gustaba ver a su hijo así de triste, pero se sentirá mejor después, ¿no?.













Quédate. 》J.V《Donde viven las historias. Descúbrelo ahora