De Contrabando

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La gente victoreaba ruidosamente, si bien no era un lugar enorme, las alabanzas parecían dignas de un concierto en el Super Bowl. La banda de Crowley (o de Lucifer mejor dicho) Había sido las que mejor había sido recibida por el público, y entre ellos, un joven de ojos azules no despegaba la vista del apuesto guitarrista pelirrojo.

-Crow...ley...- Balbuceó. No podía creerlo, por fin lo tenia frente a el, después de verlo tanto tiempo a través de una pantalla.

-Arizafel.-Su voz era aun mas bonita en vivo.- He esperado por este momento.- Corrió a abrazarlo, siendo correspondido rápidamente.- Juro que fueron como seis mil años.-

-Oh querido, no seas tan dramático.- Azirafel rebosaba de felicidad estando por primera vez en los brazos de su novio

Unos toquidos lo despertaron de sobre salto y la misma voz familiar al otro lado de la puerta.

-¡Azira! ¡Tu desayuno va a enfriase! ¡Perezoso comilón!- Si, Raguel siempre tenía algo nuevo que decir.

Se levanto con pereza y pensó en que decirle a sus padres, hoy pasaría el día con Raphalea y Newton para escojer algún atuendo que los hiciera pasar desapercibidos. Por lo que Crowley le había dicho, el concierto era en una semana, así que tendría tiempo de prepararse para buscar la ropa, las identificaciones y lo más importante; una coartada. 

Sería un escándalo que dos menores de edad, hijos de familias adineradas, fueran atrapados a altas horas de la noche en un bar de música rock alternativo.

Como había sido parte del trato, o al menos si no había trato, a modo de agradecimiento, Azirafel le dio tutorías a Raphaela en las materias que se le solían dificultar, excepto Biología, ya que en ese campo aun recibía ayuda de Crowley. Lo que si, era un poco tensa la interacción entre Newton y Raphaela, ya que le avergonzaba un poco que alguien la viera con el, pero al menos ya no le daba apodos y era un poco mas cordial.

Aun no le había dicho nada a Crowley sobre su asitencia ilegal al susodicho bar, pues no quería ilusionarlo en caso de que algo saliera mal a ultima hora y tampoco quería ilusionarse a si mismo, compartiendo la emoción con su amado para que al final todo saliera mal. Debía no solo ser positivo, también centrado y cuidar los detalles para no meterse en problemas o a sus amigos.

Los tres quedaron en ir a un centro comercial bastante lejos de la escuela o de sus casas, fueron por separado, ya que si alguien mas los veía juntos, Michel o Gabriel podrían hacer muchas preguntas. 

-Bien, para empezar, aunque es lindo el estampado de cuadros y esos suetérs, definitivamente no es lo ideal para un bar de rock y música alternativa.- Dijo mientras miraba a Azirafel de pies a cabeza.-

Tomo una camiseta blanca con unas alas negras estampadas en el pecho en estilo grafiti, una chaqueta negra de cuero sencilla, un gorro negro de lana y unos jeans negros, algo ajustados para el gusto de Azirafel.

-Estas loca si crees que voy a entrar en esos jeans.- Raphaela solo rodó sus ojos.

-La belleza tiene un precio. Además, son de tu talla, no exageres y pruébatelos.- Dijo mientras le pasaba todas las prendas y lo conducía a los probadores.- Y tu...Pulsifer... estilo vintage.... umm, nice, pero vamos a modificarlo un poco o seras como un foco de neón en ese lugar.- Escucho un gruñido de Newton pero decidió ignóralo.

Tomo una chaqueta café que tenía un toque de desgatase intencional, una camiseta de botones negra y jeans negros rotos.

-¿Rotos? ¿Enserio?-

No importa la DistanciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora