No alcanzaba a cerrarme el cierre de la falda, aun con los tacones en una de manos y entre mis dientes un lápiz labial, corrí aún con el riesgo de que la falda cayera a mis pies. Shawn miraba la televisión, era su día libre en el banco era mi primer día en mi nuevo trabajo.
Después del asalto al video club no pude volver, no quise hacerlo y decidí concentrarme en la escuela, Alice me había aconsejado vender caramelos y comida chatarra en clases y si funcionó para tener algo de dinero, pero nunca fue suficiente para mis gastos. Cuando empecé a quedarme con Shawn y Connor, el mayor obtuvo un trabajo a los tres días de regreso, era un vendedor de autos usados y necesitaban a otra persona, nunca había vendido autos pero sonaba como una buena oportunidad, así que le pedí que me recomendara para el empleo.
"¿Necesitas ayuda?" Preguntó Shawn alejando su plato con pan tostado de su pecho. Asentí, girándome de espaldas mostrándole lo que necesitaba. El típico sonido del cierre se escuchó, cuando por fin sentí que la falda me ajustaba. "Mierda, luce genial." Dijo acariciando mi trasero sobre la tela negra.
"Shawn." Reí girándome y el solo me tomo de la cintura con fuerza acercándome a él, impidiendo que me fuera, sus juguetonas manos se deslizaron de la cintura rápidamente hasta volver a llenarse de mi trasero, siendo un jodido idiota pellizcando algunas veces.
"Ponte otra cosa bebé." Pidió. "Luces muy tentadora con eso puesto, tal vez un saco muy grande para que nadie vea ese bonito trasero." Me reí y lo empuje lejos para darme espacio de los tacones sobre la alfombra, mientras ponerme me observaba sin vergüenza.
"Esto es lo único que tengo." Camine por la sala tropezando un poco con mis propios pies. No era nada buena con esas cosas del demonio.
"Eso te queda grande." Dijo burlón al ver como al menos un dedo y medio me faltaba en los tacones para llenarlos.
"No son míos, son de Alice, comprare unos cuando tenga mi primer sueldo." Dije caminando hasta el espejo sobre la pared. Pinte mis labios de un color rosado, y limpie aquello que se había salido de las comisuras con las yemas de mis dedos.
"Puedo comprarte algunos." Dijo Shawn mientras caminaba hacia el. "Sabes que puedes pedirme lo que necesites." Negué, la sola idea me molestaba, me acerqué a su rostro y bese su mejilla dejando un beso marcado, demonios, deseaba marcar toda su cara y pecho con mis besos, sonreí, y aleje la idea que guardaría para cuándo regresará de trabajar.
"Muchas gracias pero no. Los comprare después." Me tomo de la mano obligándome a girar hacia él y de un solo jalón termine sobre su regazo, mis manos tomaron sus mejillas y acerque mi rostro para besarnos, tal vez solo uno, o dos, demonios, amaba esos labios, podía pasar la vida así, sobre ellos.
Los tacones habían volado de nuevo por el piso, y mi falda se había subido de más al punto de que mi trasero estaba casi descubierto, estaba consiente pero la lengua de Shawn dentro de mi boca se movía duro contra la mía. Peor era el caso de nuestras caderas, estas se empezaban a mover en sincronía, y la situación se volvía caliente y muy húmeda.
"Déjame ver que tienes ahí." Susurro en mi oído atrapando mi lóbulo entre sus dientes. "¿Es la ropa interior negra que tanto me gusta?" Acuno sus manos sobre mis pechos y jadee por ese simple contacto.
"Tendrás que descubrirlo." Le dije sonriente y no tardó en aceptar el pase libre.
Sus dedos fueron a los botones de mi camisa gris para intentar ver un poco más, todo tenía buena pinta hasta que la puerta de Connor se cerro con un fuerte azote y termine lanzada al otro lado del sillón.
"¡Hora de irnos!" Grito Connor saliendo del pasillo. "Hey." Observó la situación con humor, no era la primera vez que nos encontraba así, con falta de aire y sudor en la frente, con mejillas sonrosadas y la intención de no tener ropa cubriéndonos, seguíamos sin recordar que él estaba en departamento. "Si siguen así Emma llegará tarde a su primer día.. jodidos conejos."
Connor trataba de hacer el nudo de su corbata gris, el también ya estaba listo con su traje rentado y zapatos lustrados.
"Ten un lindo día bebé." Shawn me dijo besándome una vez más. "Te quiero." Me susurro y sentí mi estomago explotar, demonios no resistí y volví a atraerlo a mí y besarlo una vez más.
"Que asco, apresúrate Emma." Sonreímos, Connor abrió la puerta principal antes de volver a gritar. "¡Que si no te apuras te dejo aquí!"
"¡Ya oí!" Dije aún sobre los labios de Shawn. "Tu hermano es un dolor de culo."
"Si que lo es."
...
"Muy bien Emma toma este consejo, el auto que quieras vender siempre será el auto más genial del mundo, no olvides recodarle al cliente que ellos compran el auto que tú más deseas en la vida, aunque eso sea más falso que el peluquín del señor Watson." Asentí a las palabras de Connor. "Cliente torpe, dinero en los bolsillos, sencillo."
"¿El trabajo consiste en mentir?" Pregunte mientras colocaba la placa con mi nombre.
"Claro que no, solo tienes que maquillar la verdad. Escucha esto, eres una universitaria que trabaja medio tiempo en venta de autos, no tienes suficiente dinero para uno propio..." Señaló uno de los convertibles rojos frente a nosotros. "Y todos quieren un auto genial, incluso tu..."
"Pero yo no quiero ni una mierda. Gastan mucho dinero en mantenimiento, es mas barato usar el trasporte público." Connor frunció el ceño y chasqueo su dedos.
"Si... Tal vez pero el cliente no necesita saberlo, el cliente necesita sentirse afortunado y cool, trata de hacerlos sentir así Emma, solo vende, vende no importa cuando haya que maquillar la verdad."
"Suenas como un gran fraude." Dije sonriendo y él me devolvió la sonrisa de oreja a oreja, asintiendo con desfachatez.
"Suena como que he sido el empleado del mes desde que llegue." Me reí y sacudí mis hombros exageradamente como si de verdad un montón de polvo se encontrara sobre mi.
"Eso va acabar." Chasquee la lengua. "Solo espero que esto termine sin rencores, cuñado."
"Oh." Connor rió mientras acariciaba su barbilla. "Vale, solo no corras donde Shawn el no podrá salvar a tu culo de ser pateado."
"Inténtalo."
Algo me decía que seria muy interesante.
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OTOÑO
Fanfiction(SEGUNDA TEMPORADA DE VERANO) Otoño de 1992, Filadelfia. La ciudad en muy pequeña para Emma y Shawn. Iniciada 10 Marzo del 2020