Conner

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Dick y Damian habían estado cuidando de mí, realmente no era para tanto, pero disfrutaba de la atención, sobre todo porque Damian preparaba café (Era excelente) y Dick panqueques (Le quedaban perfectos, no sé cómo lo hace) y lo llevaban a mi habitación.

-Esos dos están muy cerca de ti últimamente, sobre todo el mocoso -Jason no estaba muy bien enterado de lo que había pasado, era mejor así, la idea era no exaltar a nadie.

- ¿Cuál mocoso? Si te refieres a Damian, él se ha convertido en un joven apuesto -Dije eso en un tono muy neutral, mi intención era hacer enojar a Jason.

-No sé qué demonios te hicieron, pero de alguna manera afecto tu cerebro, llamare a Bruce, hay que hacerte pruebas para asegurarnos de que no te convirtieron en otra "Garra" (aliados de Talon) -Logré mi objetivo.

- ¿Celoso de que al fin Tim se ha dado cuenta de mi valía? -Damian apareció con una taza de café, la cual me entrego mientras miraba con superioridad a Jason.

-Gracias -Recibí la bebida -Oh, oh, el hijo de Batman me había escuchado y eso era un dolor de cabeza, pues cualquier alago se le subía hasta el cielo.

-Más bien, preocupado de que lo estés envenenando con algún brebaje mágico que te haya dado alguno de tus amigos raros -Red Hood miró con desconfianza aquella taza - ¿De qué estoy hablando? Ni siquiera tienes amigos.

-Ya desearías que fuera por eso -Se cruzo de brazos orgulloso.

-Dami, te he estado buscando por todas partes, ya tengo todo preparado para nuestra noche de películas -Claro, películas -No tardes -Dick le sonrió de una manera... ¿Cómo decirlo? Bien podíamos compararlo con un encantador de serpientes.

-Ya voy -Dijo apresuradamente para seguir a Dick.

Antes de que abandonara la habitación, Jason tomo su teléfono y lo agito como si estuviera sujetando el mango de un látigo, y precisamente, hizo el sonido de uno.

Solté una fuerte carcajada y Damian miro al mayor con tanto odio que podía palparse su deseo de cobrar venganza a toda costa, pero eso podía esperar, la "noche de películas", no.

- ¿Cómo te encuentras? -Conner llamó un rato después.

-Estoy bien ¿Por qué?

-Me preguntaba si te sentirías bien para el sábado, Damian me dijo que estabas herido y que debía cuidar bien de ti, pero podríamos dejarlo para otro día -Se escuchaba un tono de voz desanimado. Damian me estaba sobre protegiendo ¿a mí?

-No te atrevas a cancelarme, Clone Boy, si llego a Metrópolis y no estás ahí, me aseguraré de que lo lamentes -Escuche de fondo aquel sonido del latigazo y las risas de Jon y Clark, justo apareció Bruce, ver su estampa me salvo de reírme también.

-Tim, si estás hablando con Conner, dile que le diga a Clark que lo siento y que si iré a cenar con sus padres el lunes -Ese era Bruce, tome mi teléfono e hice que el latigazo sonara de nuevo -Eso no fue divertido -Dijo el hombre del mal humor eterno.

-Para mí lo fue -Al fin había podido usar esa aplicación.

Llegó el tan esperado sábado, saldría con Conner y me sentía de un humor magnifico, casi podía oír al sol cantando en Gótica, con eso ya dije todo, ahora que lo pienso, debí verme ridículo al emanar toda esa buena vibra, poco me importo en ese momento.

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