Capitulo Cinco

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Mean

Mi agenda hoy, todo cuanto tengo que hacer, me va ha mantener lejos del hotel y lo más importante, de Plann.

Se que las últimas horas han sido tensas a cuenta de esa mujer, de sus continuos intentos por alejarme de Plann.

De tantos años que han pasado, en todos y cada uno de ellos que me he centrado en mis estudios, en mi carrera de actor y en dar pasos aunque estos fuesen pequeños para acercarme a Plann, esa mujer vivió muy confiada con respecto a mi, a que no volvería a intentar acercarme a su hijo.

Estrategicamente pase un tiempo lejos, centrado en planes que me ayudarían ha acercarme sin ser sospechoso o acusado de acoso. Nunca acosaría a Plann y cuando supe, apenas hace unas semanas, que era el dueño total de un hotel decidí regresar y tratar de hacer que me vea, me conozca por su propia voluntad sin meter el pasado y nuestra relación para no asustarle y perder mis oportunidades.

Aproveche usando mis mejores cartas, siguiendo consejos valiosos que en su día recibí, haciendo todo con calma.

Hoy hasta la noche no podrá ser nada de eso.

— Mean por fin llegas.

Dejando mi chaqueta a un lado, en manos de una de las encargadas del lugar donde me encuentro, teniendo que ser preparado para una sesión de fotos para el próximo trabajo que tengo, la próxima película que tengo por hacer empezando esta en una semana y media, fijo mi atención en quien me ha llamado, sonriendo, recibiendo con un abrazo a la sabia persona que me facilito cada uno de esos buenos consejos.

— ¿Pensabas que te librarías de mi? —niego aún entre los brazos de Perth —sigues igual de feo Mean. ¿Cómo te va todo? Tienes bastante éxito y un club de fans inmenso.

— ¿Un club de fans yo? —asiente —¿no será cosa tuya?

— Mia no y por eso he venido —no puedo evitar sentirme curioso —¿tendrás un rato luego para comer? Tenemos mucho de lo que hablar y quiero que veas a alguien que ha insistido en verte.

— A las doce tendré un hueco cuando acabemos con la sesión —le pido que me siga —ahora tengo que cambiarme.

Entrando en este tipo de vestuario especialmente preparado para los cambios, siendo seguido por Perth que cierra la puerta, empiezo a quitarme mi ropa, poniéndome la que la misma mujer de antes amablemente me da, manteniendo su vista fija, la cual trata de disimular, en mi amigo.

— Ya está listo para la sesión —suelta uno de los botones que yo até —así está mejor. Mucha suerte.

Agradecido salgo del lugar, pidiéndole antes a Perth que me espere aquí, lo cual parece que hace encantando.

Deteniéndome antes de acercarme a donde es la sesión, una sonrisa se instala en mi al verle tan amablemente ayudándola.

Ahora si me dirijo hacia allí, dándoles intimidad aunque no se como acabará eso.


La sesión ha empezado a las ocho de la mañana y me supuse que acabaría a mediodía. No ha sido asi porque ahora son la una, pudiendo tomarme un respiro hasta las tres.

Cruzando ahora, con mi ropa de esta mañana puesta de nuevo en mi cuerpo, las puertas de un pequeño restaurante cerca de donde es todo el día el trabajo, siendo que luego tendremos una entrevista que transmitirán mañana para todo el mundo, busco a Perth, quien a través de la mujer con la que se ha quedado, la estilista a cargo de mis cambios de ropa para la sesión me ha indicado que estaría aquí, le encuentro al final del restaurante.

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