Capitulo 14

1.6K 218 82
                                    

La puerta fue cerrada por el peliverde por petición de ibara.

La chica observó la habitación del peliverde quien tenía una absurda colección de las figuras de all might y otros héroes por todos lados.

"Jijiji"

Ella río, aunque fuera infantil, era el encanto del peliverde.

"¡no te rias!"

El peliverde la levantó por la cintura y lanzó a la cama para comenzar con un ataque de cosquilla.

"¡no...para...jajaja...de...detente!"

Inko, quien se preocupó al no verlos fue directo a la habitación del peliverde cuando escuchó las risas y juegos de los chicos, supuso que ya era momento por lo que tomó las llaves de repuesto y salió de la casa a donde mitzuki para dejarlos con su privacidad.

Ese tipo de madres no se ve todos los dias.

La chica y el chico reían mientras que jugaban un poco.

Hasta que el peliverde se detuvo.

"¿Me dirás que sucede?"

Ella mordió su labio inferior aguantando las ganas de llorar que cargaba encima.

El peliverde notó eso y acarició su mejilla con cuidado.

"Ibara, me prometiste decirme la verdad en todo momento, ¿qué sucede?"

Tenia razón, ella le prometió eso, decirle la verdad en todo momento.

Pero no podía.

Siempre se lo decía ella misma.

Soy una zorra.

Una estupida.

Una desgraciada.

No te merezco.

No te puedo merecer.

No soy capaz de decirtelo.

Temo que te alejes de mi aunque te diga el por qué.

"..."

Ella no pudo evitar que las lágrimas comenzaran a invadir sus mejillas haciendo que el corazón del peliverde se estrujara por completo.

No sabía el por qué, pero inconscientemente la besó con cariño tratando de calmarla.

Ella sujetó sus hombros con fuerza, quería alejarlo, no era digna de esos labios ahora.

Pero no podía, no quería hacerlo.

El chico estaba preocupado, sabía que algo iba mal, pero no podía evitar sentirse de esa manera.

Poco a poco el chico acariciaba el cuerpo de la peliverde con cuidado, trataba de calmar su angustia con sus manos y con el amor que le tiene a ella.

3 años juntos, bueno, casi 3, el peliverde no quería separarse de ella en lo más minimo.

Si se sentia triste, la hará feliz, si se sentia mal, la atenderá, si estaba indiferente la mimaria tanto como le sea posible solo para verle sonreir.

Abrazarla, cuidarla, animarla, pasar todo su tiempo con ella era lo que queria.

El simple pensamiento de que le dejara le era doloroso.

No se lo quería imaginar por nada.

El chico dejó de besarla notando que sus lágrimas pararon, ella rodeó lentamente el cuello del peliverde con sus brazos para pronunciar unas palabras que hicieron corto circuito en el cuerpo del peliverde.

Fue como un rápido temblor en su cuepro, enserio, fue una sensación electrizante lo que rodeó por completo su ser.

No se esperaba esto.

"Hazme el amor...por favor"

Nuestra cancionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora