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En cuanto vio a un chico con una mirada que gritaba a los aires "ingenuo" le reconoció debido a la descripción que le habían dado con antelación.
—¿De verdad te interesa?. No ganas mucho dinero a no ser que transporten cosas valiosas.
Cuando recibió la misión de su reino vecino le pareció absurda. ¿Por qué debería dejar pasar a un campesino de la Naturaleza por los muros?. Si sus superiores lo sabían se metería en problemas o perdería su prestigio.
¿Y sólo le ofrecerían un pago miserable por eso?.No entendía porque debía mantenerlo alejado de los guardias de la nación del invierno. No tenía que, desde que desapareció el príncipe del fuego todo estaba tenso en la nación y no era el momento de peticiones extrañas e irracionales. Es cierto que el reino de la Primavera no es hostil, ¿Entonces porque le piden que guarde el secreto?. Perfectamente podría ir con su superior e informarle e iba a hacerlo, hasta que se enteró de que por medio de las personas que entraban por los muros habían criminales peligrosos.
Entonces "aceptó " la misión.
Encarceló a todas las amenazas que Atsuya y él reconocieron, en eso la princesa de hielo, quien por algúna razón se había enterado lo de los muros, les dejo tranquilos para aprender a los criminales ilegales con la condición de hacerle un favor sin preguntas.
Pronto, mientras cumplían el favor apareció el chico de la misión
Lo supo cuando lo vio.
Era un chico distraído, muy distraído. Torpe y con una licencia inusual mal escondida en su bolso.
Magos con esa clase de licencias son altamente vigilados porque suelen estar cuidando a los Reyes y cuando se separan de ellos para "visitar" otros reinos es símbolo de hostilidad.
Y aquí estaba un idiota ingenuo con una licencia mal escondida en su mochila sin ninguna clase de cuidado más que elegir otra entrada al reino para tener el perfil bajo.
—¿Hola?... Un tipo me envío aquí...necesito entrar y...
"Este tipo podría ser un idiota genuino o es brillante y peligroso". Pensó Kirina. "Lo dejaré pasar como a los otros y lo voy a arrestar apenas salga de aquí "
Pronto, a penas dejarlo entrar, su orgullo de adolescente fue pasado a llevar por el híbrido ayudante, Atsuya, y Asuto huyó sin siquiera pagarle.
Atsuya era un verdadero delincuente, pensó Kirina. La única razón que tenía para no encerrarlo en prisión apenas lo conoció era su misión.
—¡Ugh!, ¡Por tu culpa se fue ese!.
—No me culpes, tu eres el que habla aquí.
Recorrió, el peliazul, la habitación con frustración. Las preguntas que de pronto surgían le acongojaba profundamente como mago entrenado para proteger el orden.
¿Qué hacía un hechicero de grado Comandante en la nación del Invierno moviéndose por debajo del radar?.
—Buscalo y te quedarás con mi paga.
—Pfff, Okay.
A continuación el peliazul se dedicó a abandonar a la capucha mal construida en aquel callejón en donde habrían la barrera congelada y caminó tranquilo por las calles.
Incluso si preguntaba ejerciendo su autoridad la gente del pueblo respondía cortante y con miradas fulminantes lo cuál no era extraño y no los culpaba, las personas estaban enfadados debido a que nadie hacía nada por la situación de los soldados del fuego quiénes iban de allí para allá destruyendo como si alguien les hubiera dado inmunidad.
Tardo aproximadamente dos día y una noche encontrar a Asuto quien se encontraba trabajando en un lugar en el centro. Cuando Atsuya lo rastreo fue a por él y Kirina se limitó a seguirlo clandestino.
Desde una distancia prudente pudo ver como Atsuya le apartaba de la híbrida Ootani y presionaba a Asuto quién era un manejo de nervios el cuál pronto se fue calmado y al parecer llegaron a un acuerdo del cuál poco sabía con tan solo observar.
El cielo oscurece cuando ambos se adentran nuevamente a la parte trasera del restaurante en donde Asuto es emprendido por la híbrida, el nervioso y ella molesta; una escena divertida de ver por fuera.
Esperando que Atsuya salga Kirina espera malhumorado en el techo de una casa hasta que, a altas horas de la noche, ambos salen a la calle sombría la cuál no era iluminada por ningun faro, sólo el leve de calor de los soldados del fuego quienes rondan por allí derritiendo la nieve de las calles por donde caminan.
Gracias a esto ambos avanzan por las calles de forma sigilosa sin dejar huellas ni hablar entre ellos.
—¿A donde van?.
Saltando por los tejados de la capital del país del invierno siguiendo a Asuto y Atsuya a quiénes consideraba sospechosos. Iban en calles oscuras especialmente en dónde de vez en cuando les perdía el rastro, parecían vagar por la Ciudadela en círculos que pronto tuvieron sentido: Su destino era el castillo.
"¿Qué quieren?, ¿Por qué el castillo?."
Por supuesto, Kirina se sintió estúpido.
Creyó que Atsuya no sabría como entrar con tanta seguridad omitiendo el hecho de que su hermano mayor, Fubuki Shirou, trabajaba en el castillo al cuál Atsuya entraba sin permiso repetidas veces y, aunque fue descubierto en sus primeros intentos, jamás fue reprendido por eso.
Pronto ambos se encontraban en el patio de entrenamiento caminando desapercibidos, ningún guardia rondando.
Entonces Kirina decidió interferir.
—¡Alto ahí!.
Pronto el patio fue cubierto por un domo de hielo denso que atrapó a Atsuya, Asuto y Kirina dentro de él.
—¡Ambos están arrestados por invadir propiedad privada!.
Pronto una pequeña ventisca azotó con fuerza dentro de aquel lugar el cuál no los dejaba ni ver ni moverse.
—¡Diablos!.
El hielo comenzó a pegarse en sus ropas y, al cabo de unos segundos, la desesperación se sumió en sus cabezas por la asfixia.
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Quick question!.
Si le eligieran un poder a Matsuno, el werito del gorro de gato, estilo quirk de Boku no hero, ¿Cuál sería?.
Estoy trabajando en un proyecto, sshh
Segunda pregunta!
¿Les parece que dibuje algunos de los personajes?. Me cuesta encontrar imágenes de esos que no son Nosaka.
Eso, sale bye.
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l⚘Inazuma Eleven [AU MEDIEVAL]⚘l
FanfictionLeelo y sabrás de que va. Actualmente sigo publicando y corrigiendo.