l⚘Inazuma Eleven [AU MEDIEVAL]⚘l

Capítulo 1

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Entrelazaba sus dedos con nerviosismo.
Temblaba frenéticamente cada vez que un Guardia le miraba con superioridad.

En serio, ¿Cuántos guardias podía haber en un pasillo?, ¿Por que este era tan condenadamente largo?.

Finalmente se detuvo frente a una gran puerta.

— Preparate. — El chico paso sus manos por su cabello ahora um poco grasoso debido sudor.

_" No puede ser, ¡En el reino de la naturaleza no hace tanto calor!." _ Pensó Inamori Asuto, quien de pronto había sido llamado por su majestad y de allí, enviado a una autoridad mayor de otro reino.

Para ser mas específico El rey de la Naturaleza le regaño y advirtió porque ambos principes de la Primavera, su reino aliado, pedían una reunión con un "Don Nadie"; como dijo el rey.

Sentía la presión de sus palabras ahora.

Los soldados que le escoltaban abrieron las puertas que daban al gran salón. Unas cascadas daban los costados del la pared final, desembocan en un canal que va por las orillas y riega las plantas que decoran la habitación en donde se encontraban dos tronos iguales.

En uno estaba sentado un chico de rastas, vestía elegante, de color blanco, con unos lentes y una expresión sería.

Por otro lado, esta a sentada una chica un poco mas joven que el, vestía un vestido blanco con degrade hasta el verde, una tiara, zapatos verdes y esbozaba una sonrisa energética.

—Inclinate. — Recomendó el guarda con voz baja.

Inamori hizo lo recomendado.

—Gracias por traerlo, ahora retirense porfavor. — Habló el chico de rastas.

Aquel era Kidou Yuto, el príncipe y general del ejército del Reino, a los cuatro años realizó una estrategia de guerra impecable que logro acabar con un reino llamado "Ares" el cual prometía y extorcionaba.

Los guardas se retiraron a la orden del príncipe.

Finalmente solo, parecía que la presión lo aplastaba.

— Bienvenido.

La princesa saludó con una sonrisa mientras se levantana se su trono y bajaba los escalones para encontrarse con él.

— Gracias por venir tan deprisa y lamento lo repentino de el llamado.

— No hay problema... — Contestó cabizbajo el chico.

— Iremos al grano.—Esta vez el que habló fue Kidou.— Necesitamos que hagas algo por nosotros.

—¿Qué es?.

—Sabemos que tienes habilidades.— Comentó inquietando al chico.— Y las necesitamos.

—¿E-Eh?.

—También se que sabes usarla, cualquier poder sobre las plantas tiene mucha demanda en cualquier reino.— Dijo.— Aunque me sorprende que alguien que vive en la frontera pueda usar de hecho cualquier poder. Usualmente estos definen tu posición en la social y los viajes que realizas por tu reino.

Asuto no dijo nada.

— Y es por eso que tenemos una mision que tu eres apto para realizar.— Siguió hablando el joven príncipe.— Necesitamos que...

— Su majestad...— Le interrumpió de pronto Asuto.— .Me disculpo por hablar sobre usted pero no puedo ir a ningun viaje.

— ¿Y eso porque?.— Pareció levemente irritado.

— No puedo dejar a mi madre sola. Morirá si no estoy allí para cualquier cosa que ella necesite.— Dijo él.— Me niego a cualquier misión.

El príncipe habló entre dientes.— Escucha, esta situación es mucho mas que...

— Hermanito me toca hablar.— Su hermana, la princesa de la Primavera, le empujó a un lado.— Lo sabemos, tu madre esta enferma, ¿No?. Pues puedo enviar enfermeros para que cuiden de ella. Esta misión es sumamente importante y te necesitamos, porque enviar guardias, nobles o cualquier otro con influencia podría ser fatal. Además, levantate.

Asuto obedeció.

Pensó un poco. Los médicos del Reino de la Primavera son muy buenos. Tanto que naciones no aliadas ofrecian servicios por el prestamo de unos cuantos.

Cabe destacar que el no era exactamente diestro en el arte de la sanación. Tan solo podía curar dolores de cabeza.

— Si aceptó, ¿La cuidaran?.

— Por supuesto.— Dijo la chica.— No tenemos inconveniente alguno.

Volvió a pensarlo, su madre podría ser salva. Además La princesa Haruna tiene fama se ser piadosa en toda situación.

También pensó en negarse. Pero el príncipe parecía molesto por la negativa de hace rato. Retar a un poder mucho mayor era peligroso para el y su madre.

No veía que pudiera zafarse asi que desistió a la idea de rechazar la oferta.

Suspiró hondo para calmar los nervios.

—¿Cual es la misión?.— Quizo saber el joven.

Aunque cual fuera la aceptaría.

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Aquí el primer cap.
Eso.
....

Well Sale bye