Sentimientos.

V

Capitulo 5

A la mañana siguiente Samuel se fue antes de que despertarnos dejó una nota pegada en el refrigerador - me pareció un cliché - decía

«Querida Sophy, te pido que cuides bien de mi pequeña hermanita, es medio despistada así que hazlo por favor, me voy tranquilo sabiendo que eres una chica fenomenal»

Como las mañanas anteriores tuvimos que salir corriendo, Sam iba de un lado a otro corriendo en el apartamento, me causó mucha gracia, en cierto momento ella salió del baño en ropa interior porque había olvidado su toalla de baño. Mi cara ardió en un momento, ella se veia gloriosa con el cuerpo húmedo, su cabello estaba enrollado en una toalla y me pregunté por qué no había usado esa, pero no quise hacerle una observación asi.

- ¡No me mires! - gritó cuando notó mi mirada en ella - ¿No vas a bañarte?
- Eh... Creo que no, ya es super tarde, vístete rápido - dije dirigiendome a mi habitación -

Ella corrió a través de la sala y sus pechos brincaron un poco, se varían muy firmes y bonitos, también estaban cubiertos de pecas. Mientras sentía que mi cara se volvía a poner roja entré rápido a la habitación, no podía creer que mi corazón se acelerará de ese modo, es decir, son solo pechos, soy una chica, ese tipo de cosas no deberían afectarme. Julieth y yo incluso nos bañamos mutuamente cuando estuvimos muy borrachas en alguna de nuestras fiestas. Eran las 6:30 a.m, The Black abre a las 8:00 a.m, como no trabajamos ayer seguro esta polvoso, debemos irnos rápido pero... Estoy... No. No, me niego.

-¡Voy a tomar una ducha rápida! - grite mientras corría de la habitación al baño, ella ya estaba en la cocina, traía un vestido amarillo qué le llegaba a los tobillos.
- No te tardes por favor, hice pancakes para desayunar.
- Claro - respondí cubriendo mi cara con el cabello

Abrí el agua fría y la deje correr un rato sobre mi cabeza.
¿En serio había tenido qué recurrir a una ducha fría?
Ahhhg, no sé que me está pasando. Quizás sea... No, no puede ser eso.
Salí de bañarme rápido como siempre y ella estaba en la cocina sirviendo el café, me pidió que me vistiera rápido porque seguro Jackson tendría un ataque si ella no llegaba temprano.
No podía estar en desacuerdo debido al incidente de su resaca. Así que solo me puse unos jeans y la primera camiseta qué encontré. Y salí de mi habitación.

- ¿Qué crees que le haya pasado a Jackson ayer? - pregunté tomando mi taza de café.
- No tengo idea, le envié un par de textos pero no respondió, también le llamé pero no respondió.
-Ojalá no sea nada serio.
- Espero que no, ha pasado muchas cosas en años anteriores qué sería una pena qué la este pasando mal de nuevo.

Guardé silencio, ambas terminamos nuestro desayuno y salimos del edificio a eso de las 7:30 a.m, íbamos corriendo a todo lo que nos daban las piernas, Sam llamo a Buddha para ver si ya había llegado pero al parecer era costumbre de todos no responder sus teléfonos. Llegamos un cuarto a las 8:00 y él estaba dentro de la cocina mientras ambas jadeabamos exhaustas por haber corrido tan rápido.

- Oh wow... Están casi muertas ¿qué ha pasado? - dijo él aproximandose con una jarra de agua y unos vasos
- Tuvimos que correr porque se nos hizo tarde - respondí retomando rápido el aliento
-¿El calvo no llega aún? - preguntó ella sentándose en una de las mesas.
- Creo que no tarda en llegar, me pidió que no abrieramos a la hora habitual y lo esperaramos. Creo que habrá una reunión de empleados.

Sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo, tenía mucho miedo de que fuera a despedirme, claro, quizás había pasado algo y despedirán a la nueva, entré en pánico, mientras no dejaba de pensar en miles de posibilidades Jackson entró al local. Traía un sombrero, unas gafas y su traje de siempre. Mikey venía con él, y lucían muy mal.
Jackson se sentó junto a Sam y se quitó las gafas y el sombre, todos quedamos boquiabiertos, tenía un vendaje en la cabeza y ambos ojos totalmente morados. Volteamos hacia Mikey y tenia el cabello disparejo y un golpe en la mandíbula. Buddha fue el primero en hablar.

- ¿Pelea de Bar?
-Vamos Buddha... Tú sabes que no soy un tipo tan corriente.
- ¿Entonces que te pasó Jackson? - preguntó Sam al borde de las lágrimas
- Fue mi culpa - respondió Mikey en un tono de voz decaído.
- Claro que no - replicó él - Aunque me duela admitirlo... Esto fue culpa de Rosaura.
-¿Rosaura? - dijimos los tres al unísono.
- Mi madre - respondió Mikey
Nadie podía siquiera imaginar que había pasado, así que nuestro jefe procedió a explicar lo ocurrido el día anterior.
- Mikey huyó de su casa por problemas con la actual pareja de su madre, acudió a mi porque fui muy cercano Rosario en nuestra juventud, pero cometió el error de informar de esto también a su madre, cuando el imbécil con el que vive pregunto por Michael, ella le dijo que estaba conmigo y con intimidaciones consiguió qué está le diera mi dirección y se presento ayer temprano en mi casa armando un escándalo. Y diciendo que se lo llevaría, por supuesto no puedo permitir eso, así que el tipo arremetió contra mi, Mikey quiso ayudar y trajo un bat de baseball y el sujeto le tomó del cabello arrebatandoselo, y con él me rompió la cabeza, alguien llamó a la policía, él seguía tirando del cabello de Mikey y le dio un par de puñetazos mientras yo intentaba quitárselo de encima. La policía lo arrestó por agredirnos a ambos, pero sobretodo porque Mikey es menor de edad. Pasamos la mañana en el hospital y la tarde en la delegación.

Todos estábamos obviamente en shock ¿algo así pasa con frecuencia?
Definitivamente ese sujeto es un asco, al menos está en la cárcel, según Jackson el único modo de que salga es que pague los daños o que ellos levanten la denuncia, también pues, cumpliendo sentencia o servicio comunitario, pero de cualquier modo no puede acercarse a Mikey.
Lucas quien llegó tarde se quedó impactado por un buen momento, luego bromeó con que Jackson parecía tener la cabeza muy dura como para habérsela roto con un bat.
Todos nos reímos incluso él, y el día transcurrió como normalmente.

Sábado al fin, era una de las cosa que pensábamos todos.
Ya que el día libre es el domingo, ellos querían salir esta noche. Lucas sugirió que ya que Mikey es menor (aunque le faltaba poco para cumplir 18) la fiesta podría ser en el apartamento de Sam, lo cual no nos molestó a ninguna de las dos.