La calle estaba completamente vacía, salvo por unos cuantos autos pobremente estacionados a sus lados, el sonido de mis zapatillas chocando cansadas contra el pavimento era lo único que podía escuchar.
Era una ciudad pequeña, pocos edificios y mas casas que otra cosa, estaba rodeada de un gran bosque, casi sin corromper por mano humana.
Las casas eran pequeñas y acogedoras, casi todas tenían pequeñas piscinas llenas hasta arriba de agua verdosa y sucia por la obvia falta de limpieza, y balcones que daban a la calle o al patio trasero, de cara al hermoso verde natural que rodeaba todo.
-dime por favor que tienes algo útil_ digo mientras me acerco a un pequeño auto familiar, rompo la ventana con mi codo y trato de ignorar el aroma pútrido a sangre que emana de el y abro la puerta por dentro- vaya mierda- suspiro decepcionado, solo había un par de tijeras grandes- supongo que me servirán de algo- susurro mientras guardo las tijeras en uno de los bolsillos de mi mochila.
Estaba acostado en el tejado de una casa destruida, limpiando las tijeras después de vaciar ambos pisos-pues, supongo que si me sirves de algo-digo mirando al afilado objeto, aun con pequeñas marcas carmesíes entre las navajas.
La noche estaba cayendo sobre la pequeña ciudad, el silencio de la tarde empezaba a ser reemplazada por los sonidos viscosos de los infectados.
Entonces algo sonó detrás de mi.
-no se supone que puedan subir aquí- susurre aterrado, me acerqué a la ventana por la que subí. Y cuando estaba alzando mi mano para apuñalar a lo que sea que hubiera ahí abajo... una pequeña y pálida mano se asomó.
-n-no me lastimes, por favor.
Frente a mis ojos había un pequeño niño, no debía tener mas de 10 años, su piel era muy blanca y contrastaba con su cabello completamente negro y lleno de rizos.
Cuando su cabeza se asomó por completo hacia afuera, dije lo primero que se vino a mi mente desde que lo vi
-¿¡Que mierda?!
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Hades code: deadly infection [GAY]
ActionNovela ilustrada La vida como la conoces se acabó. Desde ahora, cada quien correrá por su cuenta en busca de sobrevivir. Dos reglas rigen el mundo, un acuerdo silencioso que todos los sobrevivientes de buen corazón parecen respetar: °Todo humano es...