Capítulo 2.

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Pov Kim Sang Yeon:

Hago una mueca al abrir los ojos, el sol choca contra mi cara, significando otro día de trabajo. Al menos a comparación de otros de mi clase, no tengo que levantarme tan temprano. Un pequeño movimiento hace que sienta un gran dolor en mi parte baja, puede ser un gran sabio mi amo, tan serio y pensativo pero a solas, cae tan bajo en los deseos carnales ¿no creen?. Iba a sentarme cuando la puerta fue abierta, algo nervioso cuando esa cabellera rubia se acerca a mi posición.

Yo: m-mi señor.-escojo los hombros, sin escuchar algo de su parte, su silencio es lo que más me da miedo.-justo estaba por levantarme, ¿de-

Agarra mis muñecas para recordarme nuevamente en la cama, trato de relajarme, sabía lo que vendría pero no entiendo de por qué tan temprano pero tampoco puedo hablar mucho con él. Cierro los ojos cuando su lengua recorre mi cuello, sus manos acariciando el pecho sobre la tela, hasta quitarlo lentamente, un escalofrío recorre mi espalda, sus dedos rozan en mi piel.

JungMin: en cuatro.

Sólo obedezco, apoyo mi cara sobre la tela, levantando levemente mi trasero, mostrando mi entrada. Cierro los ojos cuando invade mi interior con su trozo de carne, muerdo mis labios con fuerza para no decir nada, sabía que odiaba una queja de mi parte. Los movimientos se hicieron presentes, ni siquiera espero un segundo, tapo mi rostro, gimiendo ahogado, aprieto las trazadas con mis puños, me acostumbré al dolor pero no puedo evitar que mis lágrimas recorran mis mejillas.

Lo único bueno es que terminó rápido, extiendo mi mano hacia la tunica lentamente y me siento en la cama, si está mañana me dolía, ahora es el doble. Con la mirada baja me lo coloco lentamente, no quiero que siga mirando mi cuerpo semi desnudo.

JungMin: trae algo para comer y beber.

Asiento con la cabeza, me levanto y cojeando, salgo de la habitación, aprieto la manija, es horrible sentir esa esencia entre las piernas. No debo perder tiempo con eso, después de obedecer la orden me encargo, empiezo a caminar cabizbajo.Sin poder evitar recuerdo cuando era un niño, recorriendo el pueblo, buscando comida o algo de agua, en esa época era el peor para todos, pasábamos hambre por días y ni la clase alta podía zafarse de esto.

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¿?: ¡hey Sang Yeon!

Me doy media vuelta para ver donde provino la voz, llamándole. En mis manos tengo la bandeja con carne, frutas y vino, digno para el segundo a mando del rey. Se acerca un caballero a toda prisa, Beomhan, es novato en las tropas principales pero es ágil e inteligente, así se ganó el respeto y también le llamó mucho la atención de Narachan aunque es muy joven.

Yo: Señor Beomhan.-inclino la cabeza como forma de respeto, no quería tirar la comida y recibir otro golpe de mi amo.-perdone pero debería irme, estoy algo retrasado.

Beomhan: si lo se, sólo quería saber como estabas.-rasca su nuca, debe ser que está nervioso por algo, levanto una ceja, quería saber que le pasaba pero no puedo evitar de pensar que mi amo se espera.-hace mucho no te veo y en la fiesta estaba ocupado.

Me tenso cuando siento algo pesado en mi hombro derecho, rezo a todos los dioses que conozco que no sea quien estoy imaginando pero la cara del menor me dice otra cosa. Miro de reojo, encontrándome esos ojos que siempre estarán presentes en mis pesadillas.

JungMin: te tardaste.

Quería decir algo pero no salía las palabras en mi boca, el miedo domina mi cuerpo, con sólo ver sus ojos, sabía que todo será peor si me defiendo verbalmente. Una gota de sudor recorre mi frente, mis piernas tiemblan, mis manos transpira, agarró fuerte la bandeja.

Beomhan: Señor Roda, él estaba por llevarlo pero lo entretuve, fue mi c-

JungMin: este inútil es un simple esclavo que no sabe hacer nada.

Me empuja a un lado, haciendo que me caiga al suelo con la bandeja, tenía que soltarla y así apoyar mis manos contra el suelo, evitando golpear mi cara. Levanto la cabeza, Beomhan quería acercarse y ayudarme pero mi amo impide el paso, ambos se miran fijamente, sólo que el caballero estaba algo asustado, no querían que lo lastimaran con su magia.

JungMin: vete y olvidare esto.

Él me mira, quería saber que estaría bien, hago una señal para que se largue, suspira y se va, yo sólo me mantengo quieto, mi vista se vuelve borrosa. Un jadeo se me escapa cuando me agarra del cabello con fuerza, quería rogar pero aprendí que no servía, se agacha en frente mío sin soltarme, sólo...solo...cierro los ojos, rendido en frente de él....

Sólo espero que sea un muerte dolorosa.

Continuará...

𝑸𝒖𝒊𝒆𝒓𝒐 𝒕𝒆𝒏𝒆𝒓 𝒓𝒆𝒔𝒑𝒖𝒆𝒔𝒕𝒂𝒔. ||𝙻𝙶𝙱𝚃||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora