Rª𓄿MÉ

VIII

Se veía en frente de aquel puente, no quería pasar de nuevo por allí, está vez iba algo más temprano, 6:00 pm en punto.

A paso rápido cruzó el puente, con la cabeza abajo, sin mirar a nadie, lo que ocasionó que sin querer empujara levemente a algunas personas en el proceso.

Una de esas personas se molesto un poco y se lo hizo saber.

-Oye, fijate por donde vas.

Quería ignorarlo y seguir con su camino, y lo hubiese hecho si no fuera porque reconoció la voz de aquel chico.

Volteo rápidamente hacia el viendo como su ceño fruncido se suavisaba, cambiando a una mueca de confusión por ver de nuevo a esa chica.

-Oh, tu otra vez.

-Yo, yo paso todos los días por aquí - vaciló un poco sus palabras-

-Yo también -dijo rascandose la nunca algo incómodo -

-Por cierto, le conte a mi papá sobre ti, se sorprendió un poco.

-¿Ah si?, ¿porque?

-Nunca le había hablado de alguien a mi papá, ni siquiera de alguna amiga.

El chico solo hizo una mueca incómodo, no sabía que decir o hacer.

-Por cierto, ¿como te llamas?.

-¿Ah?.

-Que como te llamas.

-Ah, Satō Takeshi

-Lindo nombre.

Y sin más palabras de por medio y como si fuese lo más normal del mundo, Ramé giro su cuerpo hacia la dirección a la que iba, sin un "hasta luego" ni nada por el estilo.

Esto confundió más al chico, sin embargo decidió despedirse.

-¡Adios! -dijo Takeshi algo alto para que la chica pudiese escuchar ya que estaba algo lejos ya.

Esta solo alzó su mano izquierda y la meneo para despedirse así.

Sin saber porque, Takeshi sonrió algo ladino, y siguió con su camino.