05 "sensación"

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Corrió,  y mientras lo hacía se tropezó un par de veces pero fue capaz de levantarse para avanzar e ir a casa.

Intentó por todos sus medios no aterrarse al tener que cruzar nuevamente las hileras de maíz, y aún así se quedó temblando unos segundos antes de mandar todo a la mierda para terminar corriendo entre los cultivos.

Él solo quería que su corazón empezara a calmarse, que su mente solo pudiera pensar en cosas tan insignificantes como cocinar todos los postres que arruinó, no quería que su consciencia comenzara a darle vueltas al asunto del jaguar porque sabía que eso le traería problemas.

Mientras corría cerró los ojos, intranquilo y muy asustado, emociones que se multiplicaron al cien cuando sintió como algo lo sujetó de la camiseta bruscamente, como si quisiera llamar su atención.

Inmediatamente pensó lo peor, otra vez el animal, y esta vez seguro que usaría sus huesos como afilador de colmillos.

Aunque aún estuviera siendo sujetado, siguió corriendo, una escena que realmente sería graciosa si él no fuera el protagonista, movía sus piecitos aterrado, pero claramente no avanzaba, estaba desesperado e intentaba escapar del agarre como sea, apretó sus ojos aún cerrados y surgieron lágrimas que comenzaron a rodar por sus mejillas.

No le quedaba más que gritar y cuando estaba a punto de hacerlo lo escuchó.

—Seokjin... ¿Qué carajos? ¡Soy yo!—

Dejó de moverse repentinamente, abrió los ojos y se volteó solo para asegurarse de que enserio era taehyung.

Y si lo era, con el alivio invadiendo su ser, en un acto inconsciente se tiró a los brazos de su hermano, rodeando la cintura del mayor y apretándose, pidiendo protección, no quería estar solo nunca más.

La historia de taehyung con sus padres era muy extraña, no la conocía del todo, solo sabía que en realidad no era su hermano de sangre.

De echo, taehyung apenas cumplió la mayoría de edad se fue de casa, se mudó al pueblo vecino y agarró de hobby el surf, su familia solo sabía de él por los rumores que corrían en el pueblo.

Recordaba a un taehyung muy sobreprotector y cariñoso, pero su perspectiva cambió cuando una noche les dijo a todos, incluso a sus hermanitos, que no los quería volver a ver nunca más; se convirtió en un chico tosco que parecía odiarlos. Eso realmente daba miedo, y más a los dos pequeños en casa.

Recordando todo eso, se separó bruscamente antes de que su hermano lo empujara, no quería que su corazón doliera cuando estuviera ya en casa.

—lo siento.—susurró cortante, no dejando ver las ganas que tenía de volver a sentir la seguridad y el olor de taehyung.

Pudo ver cómo su hermano asintió mientras lo miraba fijamente.

—¿Qué haces aquí a esta hora? ¿Dónde están tus padres?—preguntó mientras se acercaba un poco, seokjin quiso creer que era preocupación, lamentablemente si él se encontrara a un chico cagado de miedo casi a las nueve de la noche en un campo también le preguntaría.

—N-no te incumbe—dijo nervioso, intentando controlar su ataque de pánico.

Observó como taehyung lucía sorprendido, pero en un parpadeo volvió a la normalidad, asintió casi de forma robótica y comenzando a alejarse.

—Regresa, se está haciendo más tarde—fue lo último que dijo antes de perderse por ahí.

Jin suspiró, no iba a negar que lo extrañaba, realmente lo quería consigo de vuelta, que solo estuviera con él, con su familia.

Entre una y varias fresas 🍓 KookjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora