Capítulo 12

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Como siempre que estaba muy ocupado el tiempo paso volando para Camus y antes de que se diera cuenta ya era viernes otra vez. No le extraño ver un mensaje de Milo

-Paso por ti mañana a las 9-

-¿Traes la moto?-

-No, llevare mi auto tengo que llevar unas cosas para la reunión-

-Buuuu, entonces no-

Milo mando muchos emojis de risas –Entonces te veo haya-

-Estoy de broma, nos vemos mañana a las 9-

-Ok-

Camus sonrió dejando a un lado el aparto, era una de las cosas que más le gustaba de Milo, sus mensajes eran breve y concisos, a lo largo de la semana habían intercambiado varios de ellos pero él griego no parecía querer acaparar su tiempo, ni su atención, no se molestaba si le contestaba pasadas varias horas y tampoco lo mensajeaba constantemente como para que se sintiera abrumado.

-El tipo en serio es perfecto-afirmo complacido por haber firmado contrato con el...

Shura miro a sus compañeros sin poder contener un suspiro, los amaba, más que cualquier cosa en el mundo y aunque como ahora ambos se la pasaban peleando la mayoría del tiempo, no se imaginaba así mismo lejos del barullo y el ajetreo que su compañía representaba

-Shura te gustaría decirle a este imbécil que la carne no lleva picante-le pidió Afrodita arrancándolo de sus reflexiones

-Que si lleva joder-

-No todos comen picante imbécil. La salsa va aparte-

-Con un demonio que no sabrá igual, todos somos adultos ponle maldito picante-

-Por qué no haces dos preparaciones diferentes-sugirió Shura cuya respuesta como siempre era la más obvia

-Vez asunto solucionado-dijo Death tomando uno de los tazones que tenía enfrente para separar la mezcla que estaba preparando y añadirle picante a una

-Asunto solucionado-lo imito Afrodita de mal modo

Shura volvió a sonreír, el timbre sonó y fue a abrir no le sorprendió que Milo y Camus fueran los primeros en llegar

-Pasen, aún estamos preparando algunas cosas-

Los recién llegados entraron y también sonrieron al escuchar como quienes no habían salido a recibirles estaban enfrascados en una nueva discusión

-No sé cómo los soportas- bromeo Milo entrando a la cocina

-Tu cállate-gritaron dos voces al escucharlo

Camus se carcajeo-Prepare sangría* ojala les guste-

-Todo lo que provenga de tus preciosas manos seguro sabe delicioso-afirmo Death acercándose a él quitándole el bidón que llevaba en las manos para saludarlo con un más que efusivo abrazo

Milo negó con la cabeza y tomo el recipiente para meterlo al refrigerador

-Te falta mucho mojarra-pregunto dirigiéndose a Afro

-Mojarra tu puta madre que para mí desgracia es la misma que la mía, porque no mejor vas a preparar la parrilla y me dejas en paz con esto-

Milo se carcajeo de lo fácil que era cabrear a su hermano –Tienes razón mejor voy a la parrilla, vamos encanto- tomo a Camus de la mano- ¿Vienes español?-

-Si te ayudo con eso- bajaron al área común del edificio que tenía una parrilla y mesas de madera para comer en el exterior. Shura y Camus disfrutaban de su primera cerveza mientras Milo encendía el fuego

-¿Ya se los dijiste?- quiso saber Camus

-No he tenido tiempo-

-Vives con ellos ¿No has tenido tiempo o no has querido decírselos?-

Shura volteo a verlo con gesto huraño

-No es fácil hacer esto sabes, nuestros acuerdos no tocan ese punto en ningún momento, pero no quiero dejar pasar la oportunidad-

Camus suspiro fastidiado por lo inseguro que se mostraba Shura respecto a aquello-Es lo mejor para los tres, no sé por qué lo estas dudando tanto-

-Es fácil para ti decirlo-

Camus bufo, odiaba aquella frase, no es que fuera fácil para el decirlo es que simplemente las cosas siempre eran simples que como la gente las hacía ver

-Yo solo digo que no dejes que les afecte, dijiste que Afrodita te ha estado diciendo que estas raro, vas a terminar por evidenciarte-

-Ya se-

-Además si por alguna razón se enteraran podrían mal interpretarlo y te vas a meter en aun más problemas-

-¡¡Que ya lo sé joder!!-

Shura se alejó de Camus con tal de dejar de escucharlo, se arrepentía del momento en que decidió contarle sus preocupaciones, pero bueno Camus era en parte responsable de que ahora se viera en aquel dilema que no lo dejaba estar tranquilo

Mu y Aldebarán llegaron dejando en la mesa varias cosas que habían traído del departamento

-Escapamos de los peleoneros- confeso Mu dándole a Shura un beso en la mejilla-Hola de nuevo Camus que bueno que pudiste venir-

-Si gracias-

-Él es mi novio Aldebarán, Aldebarán él es Camus-

-Mucho gusto- se saludaron con un beso en la mejilla y Camus se sorprendió bastante de conocer por fin al "sugar daddy" realmente no parecía mayor, tipo el sujeto si era mucho más alto que todos ellos pero no era el tipo canoso y arrugado que Camus había imaginado.

Aldebarán evalúo discretamente a Camus con la mirada, era justo el tipo de chico con los que Milo acostumbraba salir, pero no necesito mucho tiempo para darse cuenta de lo mucho que la pareja "no formal" se atraía, las sonrisas coquetas poco disimuladas que intercambiaban, los toqueteos indiscretos, la sonrisas radiantes que ambos tenían en al rostro

-Camus voltea Camus- el acuariano hizo caso y fue sorprendido por el click de una cámara fotográfica

-Como imagine eres fotogénico-afirmo Death revisando la toma, Camus se acercó para ver la foto

-¿Es una cámara profesional?-Cuestiono sorprendido

-Así es, no te lo había dicho, soy fotógrafo-volvió a apuntarle tomándole otra foto Camus sonrió mandándole un beso

-No le mandes besos-lo regaño Milo cubriéndole el rostro con una mano-Y tu Siciliano lárgate a tomar tus fotos a otro lado-

Death se carcajeo-Tranquilo cucaracha los vínculos de los amigos son sagrados-

-Ya cállense y vengan a comer- los llamo Afrodita y todos se reunieron en la mesa

Comenzaron a comer rodeados de charla agradable, Afrodita suspiro sintiéndose satisfecho con su ahora más numeroso círculo social, había planeado aquello para evadirse de sí mismo al menos por un rato, Shura había estado portándose bastante raro, como si ocultara algo pero ya que no tenía pruebas ni motivo para sospechar algo no podía enfrentarlo, eso no evitaba que se sintiera desanimado, esa reunión era lo que necesitaba para despejar su mente.

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