Capítulo 32

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-¿Entonces ese es tú secreto?-cuestiono Shaka admirado mirando la paella que Afrodita estaba preparando

-Solo así queda perfecto el arroz, cuando quieras te enseño a preparar croquetas-

-¿Cocinas mucha comida española? Es la favorita de Aioria-

-Shura no es feliz si no se las preparo de vez en cuando, y la paella se ha vuelto tradición junto con la sangría que hace Camus-

-¿Qué yo que?-cuestiono el acuariano entrando a la cocina

-Hablábamos de la sangría que preparas-

-¿Tu preparas la sangría?-cuestiono Aioros sorprendido, desde que había hablado con Saga respecto a sus inseguridades se había sometido a lo que él llamaba una "terapia de choque" y en las ya acostumbradas reuniones que se habían vuelto frecuentes se obligaba a sí mismo a convivir con Afrodita y Camus tanto como pudiera, descubrió para su desgracia que Afrodita era encantador y ahora tenían con el un trato más cercano del que nuca creyó posible y respecto a Camus aun le costaba lo suyo pero suponía que había personas con as que simplemente no congeniabas sin explicación alguna pero ya no era tan hostil con el

-Sí, una vieja receta, no creo que sea familiar pero mi hermano me enseñó a prepararla-alzó los hombros- ¿por cierto donde esta Aioria?-

-Afuera-respondió Shaka sin apartar la vista de la labor de Afrodita –Dijo que él se encargaría de la música hoy-

Camus salió al jardín del que se había vuelto el centro de reuniones oficial y para no variar Death, Saga y Aldebarán estaban enfrascados en una partida de domino, Milo, Shura y Mu estaban en la parrilla y tal y como Shaka había dicho Aioria se encontraba sentado en el césped con la laptop sobre las piernas

Camus le entrego una cerveza sentándose junto a el

-Huele de maravilla, me encanta la paella que prepara Afrodita-se relamió el castaño dándole un trago a su cerveza-Nunca te agradecí que me los presentaras, estas reuniones son de lo mejor-

-No tienes nada que agradecer, les caíste muy bien y Dita adora a Shaka-

-Lo sé, se apuntó a las clases de Yoga y le está enseñando a cocinar, lo cual es muy bueno para mí también ya que empezamos a vivir juntos-

Camus sonrió -Jamás pensé que fueran a terminar tan bien las cosas entre ustedes-

-Mira quien lo dice, el señor que "solo quería sexo"-

-Y sigue siendo lo que quiero, el día que a Milo no se le pare lo dejare-

-Si como no-rio Aioria mirando al mentado-Te veo muy feliz Camus me da mucho gusto en verdad-

-Gracias, la realidad es que no sé cómo terminamos así. Un día firmamos contrato y al siguiente no podía imaginar mi vida sin el-

-¿Eso quiere decir que estás enamorado?-cuestiono Aioria con la única intensión de molestar a su amigo

-Supongo que si-

Aioria escupió su cerveza haciendo reír al acuariano

-¿Quién eres y que hiciste con Camus?-

-No seas exagerado-Camus no contuvo la risa ni un profundo suspiro-No sé si es así como se supone que el amor debe ser pero...nuestro trato fue lo mejor que me ha pasado, no encuentro una razón para negar que estoy enamorado, de él, de nosotros, de lo que somos estando juntos-

Miro a Milo, el escorpión sintió su mirada y volteo a verlo guiñándole un ojo con coquetería y enviándole un beso, Camus correspondió mostrándole su dedo medio, Milo se rio y se empujó la mejilla con la lengua moviendo su puño frente a su boca en una vulgar peo clara insinuación

Nuestro tratoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora