Vivir sin prisas y a tiempo

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¿Si sabes que estás durante un viaje?
¿Que a algún punto llegarás...y en otro punto, retornarás?
Imagina...piensa por un momento todo cuanto has cargado de más; seguro que podría ser más liviano y ameno el camino.

Piensa además, que pasaría si lo tanto experimentado y disfrutado, le quedara un día...que el vuelo está por aterrizar...
¿Qué harías?

-Avanzar a prisa para abrazar a tiempo y más, la dicha.
-Bajar tu energía e intensidad, porque ya para que esforzar, si un día queda.
-Te dejarías llevar, fluir, respirar de los instantes y en lo que el destino se acerca (final del viaje o principio de otro), tú en las mismas aguas armoniosas: experimentas...disfrutas.

Pués, esa es la vida. Permitirte vivirla y que el vuelo haya estado equilibrado, aún con sus altibajos.

Disfruta de tí, del camino y lo que
vida te da. Nadie sabe cuando se posará sobre tu cabeza, sombra, que de ella luego brote luz. Por tanto, vive.

 Por tanto, vive

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Metamorfosis del alma Donde viven las historias. Descúbrelo ahora