❝Si Yo No Te Tengo A Ti❞ [Kirishima×Oc] ✓

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Dos meses atrás.

»No tengo con quien bailar, descalzos por Madrid...«

El mensaje era de Kirishima. ¡Tengo miedo!

¿Por qué? Bueno, no se cómo tratarlo; ni siquiera sé porque me pongo nerviosa, es mi amigo y eso fue un accidenté.

Los accidentes no existen.

¡Larguese maestro Oogway! ¡No es momento para memes!
Doy un hondo respiró y abro el mensaje.

-¡Hey! ¿Estás ahí?

-Si, ¿que pasó?

¡Dios! ¡Eso sonó tan cortante!

Estrelló mi cabeza contra mi almohada. ¡No quiero ver!

-¿Podemos hablar?

¡No!

-De acuerdo.

-Pero en persona... Cerca de tu casa si te dejan, o si puedo llegar a tu casa ¿cómo ves?

¿Kirishima en mi habitación? ¡Ni loca! Digo, no es cómo si no hubiera estado antes aquí arriba, pero solo fue por un instante para buscar unos CD de películas, y luego bajamos a verlo a la sala. Pero estar a solas aquí después de lo que pasó... no me atrevo.

¡¿Qué cosas estás pensando Shione?!

-En el parque de aquí cerca.

-Vale, llegó en diez.

¡¿Qué rayos estoy haciendo?!

Me acercó al espejo, me pongo un poco de brillo, mis labios estan resecos, veo mi rostro, también está reseco, mi pelo está hecho una greña.
Me lo aliso lo más rápido que puedo, y estoy por ponerme humectante en mi rostro, pero me detengo. ¿Qué hago? No es cómo si estuviera llendo a una cita... Bueno, igual necesito humectar mi piel ¿no?

Bajo rápido, mamá está en el sofá viendo televisión.

-¿A dónde vas?

-A la tienda de conveniencia, ¿quieres algo?

-No, pero no tardes.

Salgo aprisa de la casa.

Pasó antes a comprar unas paletas heladas. Ya saben, para hacer más ameno el ambiente, y en caso de no saber que decir, usar como excusa que estoy comiendo.

Llegó, y me encuentro a Kirishima en uno de los columpios, meciéndose suavemente. Qué rápido llegó, parece pensativo.
Con el corazón acelerado, tomó el valor para acercarme.

-¡Ho-hola!- intentó sonar amigable y relajada, pero no puedo, ni siquiera me atrevo a verlo a los ojos

-Shion, siéntate.- le hago caso y me acomodó en el asiento de a lado -¿Qué traes ahí?- señala con la cabeza la bolsa.

-Oh, te compré una paleta, toma.

-Gracias.- agradece tranquilo, algo raro en él.