Mi amada es mía - AU (Traducción Supercorp)

Capítulo 10 : Casi allí...

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Las siguientes semanas estuvieron llenas y ocupadas. Kara y Lena trabajaron incansablemente para resolver los asuntos de L-Corp y Chameleon para poder relajarse completamente durante su tiempo fuera. Pasaron incontables horas atendiendo entregas en el nuevo apartamento y empacando sus posesiones más valiosas y sentimentales. Lena programó a los de la mudanza para que se encargaran del resto de sus pertenencias mientras estaban fuera. 

Las pruebas de vestuario se completaron, así como la recogida de los anillos. El catering, la floristería y la banda de música para la recepción estaban listos. Las maletas fueron hechas para el día de la boda y para la luna de miel. La boda estaba a unas 24 horas de distancia. Kara y Lena miraron el apartamento de Lena por última vez para asegurarse de que no se olvidaban de nada. Lena llevaba a Kara a pasar la noche con Alex y Sam volvía a pasar la noche con Lena.

"Creo que hemos hecho todo", dijo Lena, "¿Estás lista para irnos?"

"No", dijo Kara suavemente, tomando la mano de Lena y guiándola hacia el sofá junto a ella, "quiero quedarme contigo un poco más". Kara empujó suavemente a Lena hacia abajo y se tumbó encima de ella. Besó a Lena suavemente y luego enterró la cabeza en el hueco del cuello de Lena.

"Hey, ¿estás bien?" Lena susurró suavemente y abrazándola un poco más fuerte.

Kara levantó la vista y luego besó a Lena nuevamente, esta vez más profundamente. Se abrazaron con fuerza y ​​se besaron durante unos minutos explorando suavemente con la lengua y luego relajándose en besos más suaves. Lena se estaba divirtiendo mucho, pero sentía que Kara estaba ocultando algo. Finalmente, se apartó un poco de Kara.

"Bebé, ¿qué está pasando?" Lena preguntó: "¿Estás nerviosa por el mañana?"

"No estoy exactamente nerviosa", respondió Kara en un susurro, "Es difícil de explicar, solo quiero estar contigo, Lee. Te amo mucho y finalmente está casi aquí".

Lena conocía este lado muy vulnerable de Kara. No aparecía muy a menudo, pero cuando lo hizo, Lena sabía que Kara solo necesitaba ser abrazada y amada. Lena se giró suavemente para estar encima de Kara. Pasó los siguientes minutos besándola suavemente, pasando de sus labios a su cuello y sus orejas y de regreso a sus labios. Los ojos de Kara estaban cerrados y sus manos apretaban fuertemente la parte inferior de la camisa de Lena. Lena levantó la mano y acarició suavemente la mejilla de Kara.

"Hey, mírame", susurró Lena. Kara abrió los ojos y Lena pudo ver las lágrimas que estaba tratando de contener, "Yo también te amo, bebé". Kara suspiró profundamente y levantó las manos por la espalda de Lena para acercarla aún más. Se acostaron abrazadas por unos minutos hasta que Kara se recompuso.

"Está bien, me siento mejor ahora", suspiró Kara y besó a Lena de nuevo suavemente, esta vez sonriéndole, "solo necesitaba unos minutos contigo antes de irnos".

"Podría quedarme así contigo para siempre", respondió Lena, dejando que su cabeza descansara sobre el hombro de Kara, "te necesito tanto". Después de unos minutos más de caricias, Lena se sentó en el sofá arrastrando a Kara con ella. Kara miró a Lena y sonrió con su habitual sonrisa tonta. Lena sabía que Kara estaría bien, así que se levantó y agarró su mano para que ella también se pusiera de pie.

"Está bien, está bien", dijo Kara, "ya ​​voy. ¿Estás segura de que tengo todo lo que necesito para el viaje?". Lena todavía no le había dicho a Kara a dónde iban a pasar la luna de miel.

"Sí, cariño", dijo Lena, "y una pequeña pista, podemos comprar lo que olvidemos a dónde vamos. Sin preocupaciones."

"Eso no es realmente una pista", dijo Kara sonriendo mientras agarraba su pequeña bolsa llena de algunas cosas de último minuto y se dirigía hacia la puerta.