✧🅜🅨 🅓🅡🅔🅐🅜✧ 𝓢𝓽𝓮𝓷𝓫𝓻𝓸𝓾𝓰𝓱

Capítulo Uno. ¿𝓒𝓸́𝓶𝓸 𝓼𝓪𝓫𝓮𝓼 𝓼𝓲 𝓮𝓼 𝓪𝓶𝓸𝓻?

Cuando Bill vio a Eddie salir de la puerta se quedó pensando en sus palabras.

-Te gusta, Beverly. ¿No es así?

-S-si

-Pero, ahora ves a Stanley de otra forma, ¿no? Tienes que ser totalmente honesto conmigo, Bill.

-Stan e-es mi ami-amigo.

-Lo sé. Pero, no de la misma forma que antes. Vamos, Bill. Estoy confundido, y quiero- Eddie hizo una breve pausa antes de corregirse-, necesito saber si soy el único que se siente así, o si hay algo malo conmigo, o si alguien más me entiende.

Bill había creído que lo que recientemente estaba sintiendo por Stan no era tan obvio, pero Eddie lo notó sin problema alguna. Tal vez porque él es su mejor amigo, si es eso, solamente eso. No había nada de que preocuparse.

Necesita distraer su mente de todos esos pensamientos confusos, así que baja las escaleras de dos en dos, toma el teléfono y marca a Richie.

-Hey, R-Richie, pijamada en m-m-mi casa -dice rápidamente y cuelga sin siquiera darle tiempo a Richie para contestar.

Sus padres habían salido de la ciudad, y no regresarían hasta el día siguiente por la tarde. Simplemente perfecto.

Stan estaba comiendo un poco del pastel que su madre había comprado el día anterior cuando el teléfono suena. Sin decir una sola palabra se pone de pie y contesta el teléfono.

-¡Hola, Stan! -saluda Richie con emoción.

A pesar de que no puede verlo, Stan cierra los ojos, se pone serio y... cuelga el teléfono. Espera pocos segundos hasta que el teléfono vuelve a sonar, lo vuelve a tomar y suelta un largo suspiro antes de colocarlo en su oreja.

-Muy gracioso, Stan.

-¿Qué quieres Richie?

-No siempre tienes que ser tan frío, señor rey del hielo -ríe Richie- ¡Pijamada!

¿Pijamada? ¿Así como así? A Stan no le parece algo razonable o coherente. Tuvieron que ponerse de acuerdo con anterioridad, sí, eso debieron hacer.

-Oye, Rich... no creo...

-¡Pijamada en casa de Denbrough! -aúlla Richie al otro lado del teléfono.

-Ahí estaré -Stan intenta reprimir la sonrisa, pero no lo logra. Lleva varias semanas soñando con Bill. Oh, Bill, es como un sueño hecho realidad y Stan está seguro de que lo ama. Pero le da miedo admitirlo, ademas Bill solo tiene ojos para Bev. Stan se sentía estúpido cada vez que pensaba en Bill, se reía de sí mismo por pensar que Bill podría sentir lo mismo.

¿Por qué Bill se fijaría en alguien como él? No es pelirrojo, jaja. ¿Por qué Bill se fijaría en alguien como él? Sus ojos no son azules como el cielo, jajaja. ¿Por qué Bill se fijaría en alguien como él? No tiene pecas que salpiquen su rostro de una manera tan angelical, jajajaja. ¿Por qué Bill se fijaría en alguien como él? Él no es Beverly, jajajajaja.

Mientras se vuelve a sentar para terminar de disfrutar su rebanada de pastel una extraña idea cruza su mente afilada:

-¿Y si me tiñese el cabello rojo? ¿Acaso él se fijaría en mi? -sonríe ante lo tonto que suena eso y sigue comiendo, hasta qué otra idea lo asalta-: ¿de verdad amo a Bill?

¿Y si solamente está confundiendo la amistad con el amor? Tal vez solo es eso. Tal vez...

Bill se queda recostado en su cama, esperando a sus amigos. Su cabeza da vueltas como remolino. ¿Había sido buena idea la pijamada? Está convencido de que quiere distraerse y que sus amigos son la distracción perfecta... pero entre sus amigos se encuentra Stan.