Contigo

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Narra Natalia

Suena la alarma. 08:30. Ayer Alba me dijo que me pasara por los estudios de Universal. ¿Estamos locos? Puto Universal, chaval. ¿Qué hago yo allí? No sé porque quiere que vaya, no sé que es lo que tiene que decirme que no pueda decir por Whatsapp. Además, ¿por qué allí? Puede hacerlo en un sitio más típico, no sé, una cafetería, un parque, yo que sé. No le contesté, la dejé en leído, básicamente porque me pilló de improvisto esa oferta, y me dio rabia que no me diera ninguna pista o explicación de por qué su petición, y preferí dejarlo estar e irme a dormir. ¿Voy a ir? Sí, porque confío en ella. 

Quedaban 20 minutos para las 10:00. Y yo iba tarde, como siempre a todos lados, esa soy yo. Un desastre. Tuve que buscar en el móvil la ubicación de dicho sitio, porque no tenía ni puta idea de donde estaba. Llevaba 10 minutos de retraso. Una vez delante de la fachada de los estudios, cojo aire y me dispongo a entrar.

Narra Alba

Eran las 10:10 y Natalia no había venido. No sé de que me sorprendo, después de lo de anoche no podía esperar que se presentara aquí como si nada. Hoy en el estudio estaba solamente yo, ya que hoy era nuestro día de descanso. Igualmente le dije a mi compañero Damion que estaría por aquí averiguando unos asuntos. Damion era el mejor compañero de trabajo que podría haber encontrado. Es la persona que se encarga de arreglar las maquetas y montar toda la canción en su totalidad una vez que tiene en sus manos la voz grabada. Es el mejor en lo suyo y nos entendemos a la perfección. Al ver que mi plan de estar con Natalia había cambiado completamente, me dispongo a escuchar alguna que otra maqueta de canciones nuevas que están sin terminar. Me siento en el pequeño, pero cómodo, sofá que tenemos allí cuando de repente escucho a alguien entrando como si se le fuera la vida en ello. 

Natalia: Perdón, perdón, perdón -intenta decir cogiendo aire- llego tarde, lo sé. Soy un desastre - dice mirándome-

Ha venido. Está aquí. Y yo, otra vez, sonriendo como una gilipollas. Tenía aspecto devenir corriendo, pues no podía ni casi hablar. ¿Pero como puede ser tan adorable solo disculpándose? 

Alba: ¿Qué haces aquí? Pensé que no venías porque ayer no me contestaste... Perdóname si te hice sentir mal, Natalia - empecé a decir rápidamente, estoy muy nerviosa, joder- De verdad que no era mi intención asustarte, solo quería decirte lo que tengo pensado decirte en persona porque lo veo más justo, y - me cortó para hablar ella-

Natalia: Hey Alba, tranquila - se acercó a mi y dio un leve apretón en mi hombro- estoy aquí, eso es lo que importa. No te tienes que disculpar por nada, no me asusté, simplemente no entendía que no me dieras ninguna explicación, pero ya está. Me dijiste que viniera si confiaba en ti, y aquí estoy. - dijo con una pequeña sonrisa- Y ahora dime, ¿qué es eso tan importante que ha hecho que casi eche el pulmón corriendo para llegar? - dijo y me sacó una risa-

¿Qué hago? ¿Me la como? Tiene que dejar de ser tan irresistible en algún momento.

Alba: Que tonta eres - dije riéndome por su broma- Primero gracias por venir, me alegro que al final lo hayas hecho, ya daba por hecho que no lo harías - dije bajando la mirada-

Natalia: Esto parece una entrevista, rubia -dijo soltando una risa-

Alba: Bueno, realmente es parecido a una entrevista - me miró confundida- No me mires así. A ver, cuando te dije que cantabas bien, digamos que me quedé bastante corta en esa definición. Cuando te oí soltar la primera nota ya tenías toda mi atención, me dejaste sin palabras. No podía apartar la mirada de ti, eres increíble, y no eres consciente. Me hiciste llorar, Natalia. ¿Sabes cuánto tiempo llevo sin llorar con una canción o con la voz de un artista? Mucho, créeme. Y tu lo hiciste, en un escenario de un pub cualquiera, con tu guitarra y tu voz. Nada más. No necesitabas nada más. 

Natalia: Alba, yo...

Alba: Déjame terminar porfa, que sino no acabo nunca. - ella asintió para que continuara-  Sé que ahora me dirás que no eres para tanto, que no tiene tanta importancia, que soy una exagerada, y muchas mentiras más. Ahora mismo soy una persona difícil de emocionar a través de una canción o una voz, porque estoy pasando por un momento de lucha interior con el tema de ser un una persona conocida y demás, y digamos que me he vuelto un poco más hermética en ese sentido. Y llegas tú, de Pamplona, y me mandas a la mierda lo hermético. Solo había que ver al público pidiéndote un bis, pues claro, yo te tendría en bucle si pudiera. Así que no me digas que todo esto no es motivo suficiente para que te creas lo que haces. 

Natalia: No sé que decir.. -dijo sorprendida- es la primera vez que me dicen algo así. Gracias por .. todo eso, de verdad. No sé que decir..lo siento - se le empezaron a aguar los ojos-

Alba: Natalia -le levanté la barbilla con mis dedos para que me mirara- quiero que colabores conmigo en una canción. -me miró abriendo los ojos como platos-

Natalia: ¿Con..conmigo? 

Alba: No creo que haya una persona mejor con la que hacerla que contigo


Nota: Madre mía, sé que dije antes que iba a haber maratón, lo siento, pero cuando he visto la hora que es me he hecho caquita. He tardado más de lo que creía escribir estos dos capítulos :( Espero que os guste! ¿Qué dirá/hará Natalia? ¿Aceptará? Venga, contadme cositas. Pd: Podéis seguirme si queréis :) Besitos en la frente, mua Pd2: Mañana actualizaré :)



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