𝕯𝖊𝖎𝖙𝖎𝖊𝖘 𝕬𝖙 𝖂𝖆𝖗 -𝕹𝖆𝖒𝖌𝖎-

𝕻𝖗ó𝖑𝖔𝖌𝖔

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La humanidad con el tiempo se a ido deteriorando, las cosas cambian al igual que los sentimientos y emociones. Dejaron de creer en lo que era bueno y malo, creyendo que no tendrían un castigo por todas las cosas malas que hacían en la vida.

Guerras, muertes, peleas contaminación ambiental y mental, hambruna, egoísmo, orgullo, robos, asesinatos y muchas cosas más. Aumentaron de un día para otro, el mundo se volvio el lugar más repugnante de lo que ya era.

El día en que todos se volvieron nada, fue el día en que por fin entendieron de sus malos actos, el cielo se había tornado rojo escarlata, relámpagos y truenos se lograban ver y escuchar, grandes vientos comenzaban a llevarse, casas, autos árboles y más.

–¡Oh, dios mío! Perdona nuestros malos actos mi señor.– Exclamó un hombre de edad ya avanzada, mientras que sus cansadas rodillas se estrellaban en el piso y sus manos se elevaban al cielo.

–Después de haber asesinado a tu hermano para heredar toda la fortuna de tus padres ¿Ahora te arrepientes?... No existe un dios como tal, jamás a existido. Nosotros creamos este mundo, no tu dios inexistente. Muestra respeto ante la deidad de la creación y la deidad  de la destrucción.

El hombre de edad avanzada, miro con horror  reflejado en sus ojos a las dos personas que estaban frente a el habían dos hombres frente a el, pero ambos portaban alas, el más alto tenía unas hermosas alas color blanco que a la vista se veían suaves, los ojos color café claro, su rostro perfilado y piel clara, le hacian ver cómo todo un ángel.
A su lado estaba otro hombre más bajo, sus alas eran color negro y se veían igual de suaves, sus labios gruesos y mejillas voluminosas le hacian ver angelical aunque el semblante que tenía daba demaciado miedo.

–Se arrepentirán de todos los malos actos cometidos contra su prójimo y el mundo. No merecen un lugar como este, las tinieblas será su nuevo hogar, sufrirán por siglos de sus actos y llorarán lágrimas de sangre arrepentidos pero será demaciado tarde. Este es el castigo de la deidad de la destrucción  para la raza humana.

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-MinSu