Querido Stan... te quiero {Stanley Barber & Lectora} Finalizada

#08 El descubrimiento

—Yo... 

Llamo la atención Sydney que acababa de aparecer en el sitio. Viéndolos a ambos abrazados de esa manera, aunque segura de que (t/n) más que nada debió de estar demasiado estresada. (t/n) se movió de donde estaba para mirar fijamente a su amiga en esos entonces. 

—Lamento interrumpir, pero... necesito que me ayuden. 

—Ah que bien — comento Stan —, ahora si vas a hablarme. 

—Calla Stan — le menciono (t/n) en un susurro —. ¿Qué paso, Syd? 

—Solo... vengan conmigo. 

(t/n) se levantó prontamente. Colocando su mochila en su hombro, con Stan caminando cerca de ella en esos momentos. Queriendo alcanzar la mano de (t/n), pero en realidad en esos momentos no se atrevió a hacerlo. 

La pelirroja lidero el camino con prisa. Atravesando la puerta de la biblioteca, seguida de (t/n) y finalmente Stan quien cerró la puerta. 

—Ay mierda... — soltó Stan cuando vio todo el desastre —. 

—¿Qué fue lo que paso aquí? — pregunto (t/n) —. 

Mirando todo el alrededor. Completamente destrozado, en ni un sueño incluso podría imaginar algo como aquello. Todo destrozado, parecía simplemente una escena completamente irreal.
Pero ahí estaban. 

Era real. 

—No quiero hablar de eso — contesto Sydney —. 

—¿Por qué no? — preguntaron ambos —. 

—Porque no quiero, ¿de acuerdo? 

(t/n) fue la primera en comenzar a moverse. Observándolo todo a su alrededor mientras caminaba, tomando un libro del suelo. Dándolo vuelta y mirándolo en esos entonces, volviendo a dejarlo caer al suelo.

—¿Van a ayudarme, o no? 

—Necesitamos un carpintero — contesto Stan —, o un milagro. 

—No me interesa arreglarlo, me interesa eso. 

Menciono señalando en la dirección donde la cámara de seguridad se hallaba. (t/n) supo que la cámara tuvo que haberlo grabado absolutamente todo. Y era mucho mejor que pensar en grabarlo. 

—Oh — dijo (t/n) —, claro. 

—¿Estás diciendo..? — pregunto Stan —. 

—Es lo obvio — le dijo (t/n) mirándolo —, necesitamos la cinta. 

—Eso está en la oficina del director — comento Stan —. ¿Cuánto tiempo nos castigaran por entrar a la oficina del director? 

Pregunta una vez más Stan, sin estar seguro del asunto en cuestión. 

—Puedo hacerlo yo — dijo de pronto (t/n) —, un castigo más me da igual. 

—¿Qué? — contesto Stan frunciendo el ceño —, no, ya tienes demasiados castigos con los cuales lidiar, no (t/n). 

—No nos van a castigar — dijo Sydney —, porque no nos van a atrapar. 

Los se miraron. Pronto aceptando la idea de crear un plan para que no los acabaran pillando en todo ese asunto. Creando un pequeño mapa para guiarse. Stan se sentó sobre la mesa en cuestión con Sydney al otro lado mientras que (t/n) estaba apoyada al costado con sus brazos observando el dibujo. 

—Bien, las grabaciones de seguridad están en la oficina del director aquí, pero va a estar cerrado. 

—El conserje — señalo (t/n) —.