Blanco.

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Si hubiera tenido que escoger entre admitir que estaba emocionado por la clase de arte o cortarse la cabeza, definitivamente se cortaría la cabeza. Sin embargo, como no podía conseguir un sable afilado de manera legal en menos de dos días, todo el fin de semana pensó en la clase de arte, más específicamente, en su maestro. Así que hizo lo más sensato que se le ocurrió.

Compró el material artístico más caro y profesional que encontró.

Y vaya si no era idiota, pues a pesar de que tenía el dinero, Nie MingJue nunca habría gastado 35 dólares por un cuaderno.

Se veía más que estúpido ahora, en un basurero enorme con solo cuatro personas, incluyéndolo a él. Dos de ellas eran sus únicos compañeros, Wen Chao que hace buen rato había caído dormido y Xue Yang que parecía más interesado en jugar con su teléfono que en lo que decía el profesor, y lo peor es que ni siquiera los culpaba. Se notaba de lejos que su maestro estaba dando lo mejor de sí en explicar el tema intentando hacerlo interesante, interactivo y menos aburrido, pero simplemente... la historia del arte no era ni de lejos lo más entretenido que había aprendido y valga que ha tenido que tomar clases de etiqueta y control en emociones.

Su primera clase fue así. Dos horas de teoría sobre los inicios del arte, la forma y la importancia de transmitir algo con cada trazo. No habría sido tan horrible si su maestro no estuviera vestido nuevamente con el horrible overol lleno de pintura y sus asquerosos lentes de montura negra que ocultaban toda su cara.

Su siguiente clase no mejoró en lo más mínimo. Aunque al menos esta vez el imbécil de Wen Chao ni siquiera se presentó, lo que fue ganancia. Sin embargo, Xue Yang seguía ahí y parecía haberse acabado la batería de su teléfono lo que lo hacía aún más intolerante de lo que su existencia le daba crédito. A primera hora había estado mascando chicle con la boca abierta de una forma tan molesta que le había provocado dolor de cabeza y la exposición de su maestro sobre "líneas suaves" y nuevamente su horrible atuendo de vagabundo no ayudaban a mejorarlo. Incluso, en algún punto de la clase, había llegado a pensar que todo fue parte de su imaginación y debajo de ese arbusto de cabello enredado y horribles lentes no había nada interesante.

Una hora después estaba trazando "líneas suaves" en su cuaderno profesional de dibujo con un valor de 35 dólares como si fuera un niño coloreando su mantel con crayolas en un restaurante para no molestar a sus padres.

"No, no, lo estas haciendo mal," Decía HuaiSang nuevamente, "estás tomando con demasiada fuerza el lápiz."

"¡Lo estoy tomando bien!" Dijo MingJue, aunque incluso en sus oídos sonaba como un gruñido.

"No," insistió su maestro. "Tienes que inclinar suavemente tu mano y sujetarlo entre el dedo medio e índice mientras lo apoyas en el pulgar."

"¡Lo estoy haciendo bien! Además ¿para qué demonios necesito hacer esto? Ni siquiera estoy siguiendo un patrón."

"No necesitas un patrón, necesitas acostumbrarte a las líneas suaves para que tengas una base antes de hacer el boceto."

Líneas suaves, líneas suaves, ¿¡a quién mierda le importaban las malditas líneas suaves?! ¡Ni siquiera se veían! Podía sentir como su paciencia se agotaba y el lápiz en su mano cedía poco a poco en su agarre mientras intentaba hacer más "líneas suaves" en su cuaderno caro y escuchaba las estúpidas burlas del estúpido Xue Yang de: "es un bruto enorme, no puede ni sujetar bien el lápiz", y Dioses, estaba a punto de agarrar su pequeña cabeza y azotarla contra la mesa cuando sintió un suave toque en su mano que lo hizo apartar la vista de su próxima víctima de homicidio.

La mano que lo tocaba era significativamente más pequeña que la suya. Blanca y suave que contrastaba con la suya más morena. Dedos largos, pálidos y fríos, eran demasiado delgados y delicados como la porcelana más fina, pero al mismo tiempo eran firmes cuando acomodan el lápiz correctamente entre sus manos.

Hot for teacher. | [Niecest]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora