A Ti me vuelvo, gran Señor, que alzaste,
a costa de Tu sangre y de Tu vida
la mísera de Adán primer caída,
y adonde él nos perdió Tú nos cobraste.
A Ti, Pastor bendito, que buscaste
de la cien ovejuelas la pérdida,
y hallándola del lobo perseguida,
sobre tus hombros santos te la echaste.
A Ti me vuelvo en mi aflicción amarga
y a Ti toca, Señor, el darme ayuda,
que soy cordera de tu aprisco ausente
y temo que a carrera corta o larga
cuando a mi daño tu favor no acuda
me ha de alcanzar esta infernal serpiente.
Miguel de Cervantes Saavedra.
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VIEJOS POEMAS
Poesíaselección de poesías breves de los años 80; ninguno de estos poemas han sido sacados de algún sitio de internet , nada de eso. Es literatura de un viejo libro encontrado entre restos (pertenencias)y recuerdos de una mujer que los atesoro tanto dura...