Reencarnación [Solangelo]

11: Estaba solo

Fueron días en los que no sabía de ellos, quería que regresará, pero pareciera que no iba a ser posible, cuando volvieron Percy me dio la peor de las noticias.

Mi hermana murió.

Después de eso me quedé completamente solo, en aquel campamento nunca me aceptarían siendo hijo de Hades, mi madrastra me odiaba y mi padre prefería a mi hermana Bianca, no me quedaba nadie.

Hice de todo para intentar regresar a mi hermana de entre los muertos, pero ella no quería eso y yo no quería seguir estando solo.

Percy estuvo metido en mi vida por más que intentaba alejarlo de mi, no te había conocido en ese entonces, solo tenía ojos para ese chico que me parecía alguien genial y sin duda era alguien inalcanzable para mi, además de que nunca se fijaría en mi.

Ya estaba acostumbrado a estar solo y que mi vida esté hecha una mierda.

Entonces un día te vi, no sabia quien eras, pero al verte sentía como si te conocíera de toda la vida.

Will Solace, un hijo de Apolo el dios del Sol y tu definitivamente era como un sol.

Solo te había visto un par de veces en el campamento, ayudabas a los campistas cuando estos estaban heridos, eras un muy buen médico, el mejor entre todos tus hermanos.

Y apesar de no conocerte como es debido, sentía que conocía todo de ti, conocía tu sonrisa, esos ojos azules llenos de vida, ese hermoso cabello dorado como el mismo sol y esas pecas esparcidas por todo tu rostro, conocía todo de ti.

Ni siquiera había hablado contigo antes, pero sentía que esta vez no quería perderte, que esta vez sería yo quien te proteja de cualquier peligro.

Tal vez sería lindo estar cerca de ti.

"Quedate quieto, Di Angelo"

Me equivoque, tenerte tan cerca no fue como me lo imagine, eras como un sol, literal, con ese cabello dorado que brillaba más a la luz del sol y esa sonrisa deslumbrante, demasiada luz para alguien que prefiere la oscuridad.

"Solace, duele" me queje.

Aquel día me había lastimado la mano con un cuchillo, juro que fue un accidente, pero tu estabas siendo muy exagerado, no era nada grave y sin embargo allí estabas limpiando la herida, para luego venderla como es debido, como si fuera lo más grave del mundo.

"Listo, sombritas. Ya quedó"

Después de que dijiste aquello tomaste mi mano sana y dejaste un beso en ella, no pude evitarlo y me sonroje, eras demasiado confiado y atrevido que podía ser molesto.

Pero me gustaba que fueras así, tal vez no lo demostraba como es debido, soy feliz a tu lado, tu simple compañía me hace feliz.

Se podría decir que eras el tipo de chico que me gustaba.

¿Y Percy Jackson? Bueno, si tuve un amor con él y tal vez lo siga teniendo, pero tiene novia y el definitivamente no era mi tipo.

Te tenía a ti y eso está lo suficientemente para mi.