Cold Girl || Kim Taehyung || © ¡TERMINADA!

Capítulo 59

Ya estábamos en el aeropuerto, nuestro vuelo pronto saldría, ahora tocaba la parte difícil, la despedida

—¿Tienen sus pasaportes? —preguntó por enésima vez mi madre

Rodé los ojos

—Si mamá, tenemos todo.

—Lo lamento, a veces se pone así de espeza—dijo papá con una mueca

Mamá le tiró un codazo, me reí

—Vengan aquí —nos abrazó a cada uno muy fuerte —Cuídense mucho —me miró seria —Y llama cuando llegues, estaré atenta al celular —asentí

—Siempre la cuidaré —respondió Tae mirándome

Por más que Taehyung este vestido con ropa deportiva, gorra, lentes y su tapa bocas llamaba mucho la atención

Podría estar vestido hasta de vagabundo y seguiría llamando la atención

—Cuida a mi hija Taehyung —dijo mi padre serio a mi prometido

Mi prometido, suena tan lindo eso, luego será esposo

—Si señor —dijo asustado Tae

—Papá —lo miré mal

—¿Qué? —preguntó inocente —Y tú ven aquí —me abrazó y besó mi cabeza —No te olvides de nosotros, niña.

—Jamás lo haría —le sonreí

«Última llamada para el vuelo 4726»

Era nuestro vuelo

—Nos tenemos que ir —sujeté bien mi mochila, Tae cargaba la jaula de Apolo —Los veré pronto, los amo —dije mientras nos alejamos

Agitaron sus manos en despedida, mamá lloraba y papá la consolaba. Quería un matrimonio como el de ellos y como el de los padres de Taehyung, aún no los conocía en persona, pero siempre me hablaba de ellos

Mis ojos se cristalizaron

—¿Estás bien? —preguntó preocupado, asentí

—Lo estoy, solo que las despedidas nunca me han gustado —dije triste

—A mí tampoco, pero son necesarias. Además, los verás pronto —besó mi mejilla

—Lo sé —sonreí porque era verdad

—Boletos —pidió el de control

Llegamos a nuestros asientos, mi chico había comprado boletos de primera clase, acomodé a Apolo entre los asientos, estaba algo inquieto

Se saqué un juguete y se lo puse

Me tocó estar en el pasillo, luego de un rato las aeromozas dieron sus indicaciones para que el avión despegara sin ningún problema

Entrelacé nuestras manos y decidimos dormir, era un viaje largo

Me acomodé en su pecho, me abrazó, besó mi cabeza y nos cubrí con una manta

Y nos quedamos dormidos

Llegamos a Seúl un poco más de las tres de la mañana, prendí mi celular. Tenía un mensaje de Megan diciendo que ya había llegado, eso fue hace quince minutos

Ella nos iba a recoger

—¿Dónde está? —preguntó Tae mirando a todas partes

—Según su mensaje, ya está aquí —la busqué con la mirada, pero nada, no la veía

—¡Williams! —gritaron mi apellido, me giré y vi a la loca de mi mejor amiga sola

Sonreí y corrí hacia ella, nos abrazamos