"Secretos del bosque: Viaje a Seúl"

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Aquel chico alto que vestía casual, de cabello café, con una mochila en sus hombros y una cámara colgando de su cuello caminó hacia el bosque, un bosque que tenía una sorprendente historia…

Trataba de buscar un relato para sobresalir en su carrera, además quería revisar si era verdad aquella historia que le contó su tía; después de caminar llegó a la entrada del bosque, la cual estaba protegida por unos cuantos arbustos espinosos, no tuvo opción que cruzar entre ellos.

̶ ¡Nadie mencionó que había espinas! –se quejó el chico al salir con unas cuantas enterradas, consiguió quitárselas y continuar.

Avanzó lo suficiente como para lograr perderse en ese inmenso lugar, al notarlo dio un suspiro y decidió descansar. No fue hasta que un ruido se escuchó, venía de los arbustos y aunque trató de no darle importancia volvió a oírse, esta vez no pudo evitar estar asustado; de pronto apareció a sus espaldas una persona con capa y capucha oscura cuya estatura era más baja que la del joven, él al darse la vuelta la miró, la persona bajó su capucha revelando su rostro y se pudo dar cuenta de que era una chica de cabello negro.

̶ ¿Y tú qué? –preguntó ella al chico.

̶ Eh… yo… Pues…  ̶ comenzó a balbucear nervioso.

̶ Oye, habla bien, no comprendo lo que dices  ̶ expresó ella al no entenderlo y él por fin reaccionó.

̶ Sólo intento encontrar una buena historia para ayudarme en mi futuro trabajo.

̶ Pues aquí no puedes…  ̶ le prohibió la chica mientras comenzaba a caminar y lo esquivaba ̶  así que vete a otro lado.

̶ ¿Por qué? Es un buen sitio  ̶ dijo viéndola alejarse, al instante ella se detuvo y se dio la vuelta.

̶ Parece que eres periodista ¿no? Si quieres hacer un reporte de este bosque nadie te creerá, y no queremos chismosos después de que una chica causó caos hace tiempo…

̶ ¿Qué chica?

 ̶ Una chica que mi padre conoció, vino a este bosque por algo y causó mucho alboroto…

̶ ¿Y por casualidad sabes… cuáles son sus nombres?  ̶ preguntó curioso, ella lo pensó un momento.

̶ Mi padre se llama Erick y él me dijo que la chica se llamaba Sang  ̶ reveló, él quedó sorprendido.

̶ ¡Mi tía es la tal Sang que tu padre conoció!

̶ ¡¡Qué!! –exclamó impactada.

̶ Sí, ella me contó todo lo que vivió aquí…

̶ Supongo que sí es… por ella hemos tenido que lidiar con muchos problemas.

̶ ¿Es por el libro?

̶ Así es… ¡Cierto, el libro ¿Cómo está? ¿No lo perdió? ¿Qué pasó con él?! –preguntó preocupada.

̶ Esta en un lugar seguro dentro de su casa, tranquila…  ̶ aseguró el joven.

̶ ̶ Excelente  ̶ expresó ella y con un silbido llamó a un gato, quien salió de los arbustos.

̶ ¡¿Squiqge?! Mi tía me contó tanto sobre él que siento que lo conozco…

̶ Así es; por cierto, ya hemos hablado lo suficiente y aún no sé tu nombre…  ̶ mencionó la chica.

̶ Ah claro, soy Kyun Han  ̶ se presentó el coreano.

̶ Yo Koru… dejemos la charla un rato, debo ir por el libro  ̶ se dirigió a Squiqge ̶  conviértete en nuestro favorito –de inmediato el cleptogato se transformó en dragón.