Día16: Era...

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Querido diario:
Y eran los versos tan bonitos de su alma,
porque su corazón estaba lleno de raíces, secas y antiguas.

Y era la poesía tan bella de su mente.
Llena de libros terminados, libros inconclusos, uno que otro cuento para niños, y una que otra poesía cursi.

Y me encantaba,
como sus ojos no eran visibles a traves de su cabello desordenado e incómodo, me encantaba como sus labios escondían verdades y mentiras, misterios y secretos.
Era un libro prohibido, restringido, un mar tan profundo que era difícil tocar fondo, conocerlo era tan duro como contar las estrellas o la arena de la playa.

¿Porqué tengo que amar lo prohibido?

¡Qué angustias!
¡Qué penas!

Diario de una escritora💭Donde viven las historias. Descúbrelo ahora