Capítulo 3.

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LISA

Lisa: -Lo siento Jennie, ¡yo me encargo!.

Jennie: -¡Pero apúrate y hazlo de una vez!.

Salí corriendo lo más rápido posible en dirección al garaje, y al llegar note que la puerta si estaba abierta. Salí a la calle, mire a todos lados de forma desesperada para ver si encontraba a ese peluche peludo. Al no verlo, rápidamente decidí ir hacia la izquierda, era algo de mi intuición femenina o mejor dicho de sobrevivencia, porque si no lo encontraba perdería mi trabajo. Dejé que mis instintos me guiaran hasta que llegue una pequeña tienda de autoservicio. Pude divisar a un pequeño perrito en las afueras del local, me tome la precaución de avanzar lentamente para no alertarlo, ni mucho menos asustarlo. Me acerque lo más sigilosamente posible hasta llegar a su lado, me sorprendí al ver que no se alteró con mi llegada, lo agarre lo más rápido posible, y luego de verificar en su placa que era el perro que buscaba, lo lleve a casa.

Al llegar, lo solté en el patio y le ordene que vaya con Jennie, luego cerré con llave la puerta e intente olvidar este episodio.

Lisa: -Jennie, lo encontré. ¡Gracias por darme la oportunidad de ir a buscarlo!.-

Jennie: -Bueno, bueno, ya esta heroína. Ve a limpiar adentro o nose, pero no nos molestes más.- Asentí con mi cabeza y me dirigí al comedor.

JENNIE

Jisso: -¡Jennie no seas tan cruel, nunca te ví actuar así con alguien!.-

Jennie: - Sabes lo que pienso Chicken. Por ella Marta se fue de la casa.- Dije sentándome en la reposera.

Jisso: -Yo creo que ella no tiene la culpa. Sólo fue contratada por tu madre. Si alguien tiene la culpa, sería ella. Al fin y al cabo fue la que despidió a tu anterior sirvienta.- Dijo sentándose en la otra reposera.

Jennie: -¡Pero ella intenta reemplazarla, Jisso y nadie hará eso!-

Jisso: -Estoy segura de que no quiere eso, Jennie... Yo creo que pasa otra cosa, no es posible que odies tanto a esa chica, es una santa... ¡Esto es un trabajo para Super Jisso! la mejor investigadora privada.- Dijo saltando de su asiento, con una voz más gruesa, fingida. - Averiguaré qué hay detrás de todo esto, Jennie... Si es que ese es tu nombre...- Puso su cara a centímetros de la mía, mirándome con unos ojos desafiantes.

Jennie:-¡Ay no! Por favor, no lo hagas. Comenzarás a hacer preguntas todo el tiempo, te pones irritante, Chicken.- Dije riéndo.

Al otro día.

Desperté con la voz irritante de Lisa.

Lisa: -Señorita Jennie, despierte. Le traje el desayuno. ¿Puedo pasar?- Sonreí un poco. La molestaría un poco por sacarme de ese hermoso sueño.

Jennie: -Mmm... Lo voy a pensar, espera.-Dije volviendo a meterme dentro de las sábanas.

Lisa: -Señorita Jennie. Tengo muchas cosas que hacer. Sólo le voy a entregar el desayuno.-

Jennie: -Dije que esperes, idiota. ¿no escuchas?- Volví a sonreír imaginando su cara en estos momentos, pero se transformó en una de sorpresa al ver como Lisa entraba a la habitación.-¿Que mierda haces? ¡Esta es mi habitación, no puedes entrar así como así. Le voy a decir a mi madre y...-

Lisa: -No tengo tiempo de lidiar contigo ahora, tengo mucho trabajo señorita Jennie...- Caminó lentamente hacia la puerta. Frenó enfrente de esta.-Y que tenga un excelente día.-

Solté unos gritos e insultos más, pero pareció no darles importancia.

Jennie:-Tiene que haber algo que le moleste, ¿cómo es que siempre está tan calmada?... La odio.-

LISA

La señora Kim, me hizo regresar a la tarde, ya que debía empezar a darle las clases de matemáticas, a Jennie. No quería hacerlo, pero decidí aceptar ya que me pagarían doble.

Me dirigí a la habitación de Jennie y golpee su puerta.

Lisa: -Jennie... Ya estoy aquí...Jennie...¡Jennie!... Voy a entrar...- espere unos segundos y como nadie contestaba, decidí entrar. La vi de espaldas a la puerta, con sus audífonos puestos, bailando y cantando una canción. La observé por unos segundos.

-Se ve linda...-Pensé. Negué con la cabeza intentando sacar esos pensamientos de mi cabeza.

Me acerqué a ella y le toque el hombro.

Jennie: -¡Qué mierd... ¿Lisa?. Hay lo que me faltaba. ¿Qué haces aquí? se supone que tengo que lidiar contigo solo a la mañana...-

Lisa:-Tu madre me pidió que venga a darte las clases de matemáticas.-Sonreí sabiendo que no le gustaría la idea.

Jennie: -No puede ser... Lo que me faltaba...¡No necesito tu ayuda, idiota! De seguro harás que me retrase más.- Dejó sus audífonos en su cama y salió apresurada de la habitación. Supuse que iría a hablar con su madre, así que decidí esperarla.

Me puse a observar disimuladamente las cosas que había en la habitación. Tenía una pared repleta de dibujos, muy buenos. Había fotos de ella con Jisso, de ella de niña, con sus padres, tocando la guitarra, con Kuma. No pude evitar sonreír con ternura.

-Es muy hermosa...- Pensé en voz alta.

Noté un cuaderno en su escritorio. Estaba abierto en una hoja que a simple vista, se veían tachones y cosas escritas. No me resistí y me paré al lado. Comencé mirando disimuladamente, pero terminé tomándolo y leyendo 3 páginas. Eran canciones.

Jennie:-Está bien, te daré una oportu... ¡No me jodas! ¡¿Qué mierda haces con mi cuaderno?!- Dijo corriendo a donde me encontraba y arrancándome el cuaderno de las manos.

Lisa.-Jennie... Discúlpame.-Bajé la cabeza, pero no me arrepentía de haberlo hecho. -Dejame decirte que escribes muy bien... En verdad me gusta lo...- Jennie me interrumpió.

Jennie:-No, no te dejo. No lo vuelvas a hacer. Es una orden.- Dijo, apoyando el cuaderno en su lugar y suspirando.-Bien... Empecemos con la clase y ya...- Dijo yendo a su estantería. Sacó un par de libros y una calculadora.

Estuvimos estudiando 2 horas. Al principio no entendía nada, pero después de explicarle de varias maneras, logró a entender mejor. No pude evitar quedarme observándola un par de veces. Es difícil creer que la persona de las fotos y esa canción que leí, me trataba de esa manera.

Jennie: -No era tan difícil.- Dijo levantándose.-Ya te puedes ir, idiota. No voy a necesitar más de tus servicios, gracias.- Sonrió.

Lisa: -por hoy, terminamos. Pero en un par de meses rindes y recién ahora lo entendiste... Tendrás un par de clases más, hay que asegurarnos que te valla bien. Salí de la habitación sin esperar una respuesta y me dirigí a mi casa.







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"La Sirvienta" (JENLISA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora