1. FREAK

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Nací con el demonio como mi patrón a un lado de la cama cuando vine al mundo y ha estado conmigo desde entonces”

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Y allí estaba yo entre la oscuridad entre la tiniebla roja como la sangre, allí estaba en medio de una guerra conmigo misma, con él miedo recorriendo mis venas, con mi corazón que cada segundo que palpitaba me recordaba mis errores, Allí estaba en vuelta en una manta blanca ocultando mis imperfecciones, las imperfecciones que cortaba y la sangre las recorría y ahora después de mucho tiempo solo me quedan cicatrices, cicatrices que me recuerdan cada momento en mi vida donde no era feliz. Mire fija vista a la oscuridad que me consumía poco a poco y las tinieblas que se percibían daban un olor de sangre fresca igual que todo el lugar, tenia unas zapatillas de ballet que me quedaban grandes, y me pesaban con cada movimiento que hacia, cerré mis ojos por un instante intentando caminar y huir de aquel lugar ignorando el peso, pero cuando abrí mis ojos una luz blanca reinaba en él lugar donde estaba me asuste y me aferre mas a mi manta blanca que era suave como él algodón

-!Damas y caballeros, niños y niñas, soñadores, escritores, y artistas bienvenidos al lugar donde todos sus sueños se vuelven realidad, Un lugar muy especial donde hasta él menor sueño y la mayor pesadilla se cumplen, Como nuestro primer acto esta lo que les e prometido a todos hace mucho tiempo, Saludan, Aplaudan y vivan por “FREAK

Todos empezaron a aplaudir no podía ver a las manos que aplaudían  por que la única luz me alumbraba a mi, una melodía de piano se escuchaba a lo lejos y una voz me susurraba “Solo Baila”  estaba aterrada mis zapatillas eran cada vez más pesadas y mi cuerpo mas delgado, cerré mis ojos para derramar unas lágrimas, mientras mi cuerpo intentaba moverse al ritmo de la melodía mis manos no soltaban la manta. Pero a la vez se movían mis hombros con ritmo, mi cintura empezó a hacer lo suyo pero con sutileza y lento ya que la melodía era muy despacio, mi corazón se acelero y mis lágrimas se hicieron cada vez mas fuertes, tenia miedo de eso estaba segura pero aun así mis pies empezaron a moverse a pesar de lo pesadas que sentía las zapatillas me puse de puntillas y mis piernas empezaron a emocionarse y siguieron la melodía, las zapatillas se hicieron mas ligeras con cada movimiento que hacia, elevaba mis piernas dando volumen a mi falda larga que traía puesta, caminaba y al mismo tiempo daba saltos mientras la tiniebla me daba mi lugar, la luz blanca me perseguía para darme brillo, aun seguía con los ojos cerrados y con mi manta aferrada a mis manos ya que sentía que me estaba dando un tipo de protección o simplemente era miedo “miedo” de que miren mis imperfecciones a pesar de que no se mira a nadie pero sentía que alguien me admiraba, como nunca nadie lo había hecho, como nunca lo había sentido que lo hacían, seguí moviendo mis delicados pies hasta que me olvide de mis penas, me olvide de mis heridas, y cicatrices, de mis tristezas, y de mis vacíos llenos de remordimientos, me olvide de “Todo” las lágrimas descendían pero eran de felicidad, la felicidad que hace mucho tiempo había olvidado como se sentía la que hace mucho tiempo pensé que ya no regresaría, pero regreso, y regreso mas viva que nunca.

La melodía paro y yo me detuve haciendo una reverencia, abrí mis ojos y todos estaban aplaudiendo mientras me tiraban rosas de color blanco no los podía ver ya que aun seguía obscuro y la luz blanca estaba justo en mi pero sabia que tenían una sonrisa en su rostro sólo para mi, yo sonreí, como hace mucho tiempo no lo hacia me sentía viva, ese sentimiento que sabes que quieres que sea para toda la vida sin importar las circunstancias, sin importar nada sin importar que no puedas, sin importar que fracasaste o que lo lograste me quería sentir viva “ViVa para toda la Vida”.

-!Spencer!-  Me gire al escuchar mi nombre aun con mi sonrisa en mi rostro

Spencer Pritt!- escuche una voz enojada pero esta vez cerré mis ojos y todo se volvió negro.

Intente abrir mis ojos pero una luz molesta hacia que ardieran mis ojos

-¡Spencer Pritt ya te dije que te levantaras o yo te levantare!- Abrí mis ojos y vi a mi mamá que tenia él mismísimo infierno en sus ojos de lo que enojada que estaba.

-No ya voy, tranquila- mi mamá me miro con cara de preocupada y se dedico a dar un suspiro

-Todavía tienes tiempo. Duchate y sal preparare él desayuno-

Salió de mi cuarto, mientras yo me dedicaba a mirar mi alrededor, me deje caer en mi almohada cerrando los ojos para otra vez recordar mi momento de felicidad

-Otra vez a la realidad, a mi horrorosa y triste realidad-

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Gracias por leer si les gusto me pueden dejar sus estrellas y un comentario, con él paso de los capítulos se va a hacer mas entendible la historia, se los promett.

 

Mi Muñeca de PorcelanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora