La mañana estaba tan tranquila como un domingo en vacaciones, les habían cancelado las actividades por la ola de calor que invadía Seul y ceo se apiado de ellos por la falta de luz en la empresa, por lo tanto tampoco tenían aire acondicionado o ventiladores.
YoonGi se despertó temprano ese día, tenía todas las intenciones de preparar un lindo desayuno a su novio, pero cuando sus ojos se abrieron por primera vez en la mañana no vio en la habitación a JiMin, entonces supo que él había ganado otra vez.
Agarró su celular viendo la hora, el reloj marcaba las 7:17 de la mañana, reviso sus notificaciones y decidió responder los mensajes de su mejor amigo. Así fue hasta que por fin decidió levantarse de la cama para bañarse y luego bajar hasta la cocina donde su lindo novio preparaba el desayuno para todos.—Buenos días –fue lo primero que dijo, cruzó la puerta de la cocina poniéndose una camisa. Olía a waffles y a crema sin hacer, café y diferentes tipos de té, también un poco del fuerte perfume que JiMin usaba.
—Buenos días yoonnie –habló, estirando su mejilla hacia novio que le regalaba los buenos días con un dulce beso en la mejilla.
El rapero lo abrazaba por detrás, dejando muchos besos en su nuca y pequeños apretones en su cadera. YoonGi amaba mimar a JiMin de todas formas posibles, le encantaba la idea que el menos sienta cuando amor le tenía. Y a JiMin le agrada aquello, lo hacía sentir amado y eso llenaba su interior de calor y sentimientos rosados que no podía explicar.
—¿Necesitas ayuda bebé? –Jimin asintió y le pidió que cortase la fruta de la heladera.
YoonGi aceptó y dejó el celular en la mesa, buscando la fruta entre las cosas que estaban en la heladera.
En ese momento tal vez pensó que nada sucedería, tenía la confianza suficiente sobre él otro. El problema realmente no fue ese, no fue dejar el celular sobre la mesa ni le importaba que se llene de harina de waffle o crema sin batir, lo que vino después fue el problema.En el momento en el que a YoonGi le llego un mensaje de HoSeok, JiMin pensó que era el momento perfecto para pedirle que bajara para el desayuno. Ambos estaban el grupo de los siete pero JiMin dejó su celular cargando arriba y realmente sería un desperdicio volver a subir.
Entonces tomó el celular de YoonGi y lo desbloqueo con la huella, pensó encontrarse con algún meme de esos que HoSeok enviaba por whatsapp, o algún sticker, hasta pensó en que hablaban de cualquier cosa o sobre una nueva canción.«parece que la apuesta te quedo mejor de lo que esperaba. Ahora eres el novio de JiMin, de nada» fue lo que leyó, ese era el mensaje de HoSeok. Jimin en ese momento no supo qué pensar, realmente no quería pensar tan profundo eso, tal vez sería otra cosa que no lo vinculaba a él en lo absoluto. Aunque sabía que si HoSeok lo había mencionado era por algo. No debía subir los mensajes, no debía.
Subió los mensajes, para ese momento sus dedos temblaban y la crema había quedado totalmente olvidada. No debía.
«20 días y 20 besos completos» leyó por primera vez, se sintió algo aturdido por eso, se sentía algo perdido en las letras. Sabía que no debía indagar en los asuntos de Yoongi y le tenía la confianza suficiente para no desconfiar de él, no era cosa suya meterse en la privacidad de su novio.
«décimo séptimo día, más que completo» aquel día, fue día diecisiete estando juntos, fue el día donde se entregó a él. Sus ojos picaban lo suficiente en ese momento, su garganta tenía un nudo intragable y los chillidos internos de su mente desperdiciando todo de él, lo aturdía por no entender del todo, lo aturdía porque no quería desconfiar de YoonGi.
«décimo día, completo» mientras más leía más quería odiarlo, pero no podía, realmente no podía odiar a yoongi. Sus ojos ya tenían una capa de lágrimas, mientras otras bajaban por sus pomposas y rojas mejillas.
«quinto día, completo» su corazón dolía tanto en ese momento, las ideas llegaban a su mente como rayos en una tormenta, torturándose él mismo con cada palabra que leí.
«primer día, completo» leyó. Para ese momento sus lágrimas eran una cascada sobre su piel, sus ojos eran piedras rojas y su corazón un cristal roto que dolía tanto como cortaba sobre su alma. Temía porque se le escapara un sollozo en alto y llamar la atención de quién era su novio.
«¿lo harás?» suponiendo la fecha HoSeok mandaba ese mensaje desde el aeropuerto «lo haré» y YoonGi respondía ya estando en casa.
Para ese momento ya no sabía qué pensar, ¿y si todo era una mentira? ¿realmente aquello era real? ¿siquiera YoonGi lo besaba con sinceridad? Miles de cuestiones corrían por su mente, una maratón de ideas daba inicio en su cabeza y por un momento sintió que se desmayaría si seguía con esa tortura. Realmente los huecos empezaban a rellenarse a de a poco, por eso YoonGi había empezado a besarlo de nada, por una apuesta.
—¿bebé? –YoonGi lo llamó a sus espaldas, se acercó a él y entonces el primer sollozo salió como un grito de angustia casi silencioso —. ¿estas llorando? –Él sabía que sí, pero no sabía por qué.
JiMin lo vio a los ojos, se veía tan herido, tan dolido que YoonGi sintió su corazón romperse un poco en ese momento. Intentó acercarse a él, pero JiMin solo evito aquello y retrocedió sobre sus pasos. Entonces fue cuando YoonGi vio el causante de sus lágrimas, el celular todavía estaba entre las manos de JiMin y el chat estaba en su mayor resplandor. En el inicio de todo.
Supo en ese momento que todo empeoraría, y así fue cuando JiMin abrió la boca para hablar después de ese largo silencio que torturó tanto el corazón del mayor.—¿Por qué? –preguntó, su voz estaba tan rota como él.
Era claro, en ningún momento menciona sus sentimientos en aquel chat, por supuesto que no entendería del todo el por qué de aquella apuesta. Por supuesto que solo era la mitad de la verdad.
—Era demasiado obvio que tú no estarías nunca enamorado de mí, tan imposible. Pero jamás pensé que harías algo como… Como esto –Su voz cada vez se oía menos, tartamudeaba tanto y los hipidos tampoco ayudaban en mucho, su lengua divagaba en palabras que ni él mismo lograba entender —. Una apuesta, eso soy.
YoonGi estaba en pánico, no quería esto, estaba tan enamorado que dolía tanto y lo sabía, lo sentía, tal vez no hizo las cosas como eran debidas pero nunca lo hizo con malas intenciones. Se rompió un poco cuando JiMin dejó su celular sobre la mesada llena de harina, y luego se fue, con lágrimas cayendo sobre sus colinas de carne rosa y su corazón tan roto como la botella de un ebrio fuera de un bar ilegal.
Quiso explicarlo todo pero para ese entonces sus amigos ya cruzaban la puerta pidiendo el desayuno y JiMin ya estaba escapando de todos, perdiéndose detrás de la puerta de la cocina y luego por las escaleras y YoonGi fue tan cobarde para buscarlo.
Ahora se sentía perdido porque realmente debía buscarlo, y así fue, pero JiMin no estaba en su habitación, ni en el baño. Jimin no estaba en su lugar, en el lugar de ambos.
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SIN EDITAR
NADA DE NADAD O L Y
Ta muy cortito?
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después de veinte besos • 𝐘𝐎𝐎𝐍𝐌𝐈𝐍
Fanfiction𝐘𝐎𝐎𝐍𝐌𝐈𝐍│en algún momento JiMin se enteraría de que todo fue una apuesta, pero ese momento no era ahora, ni mañana, ni lo que restaba del año.❞. ➷│ YOONMIN ➷│ yg;; top ;; jm;; bttm ➷│ BTS-U ©│22 ©│Se prohíbe su copia y/o adaptación...