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Tal vez debía pensar un poco lo que hacía, lo que menos deseaba realmente era romper un poco más el corazón de su pequeño amigo. Jimin era una personas frágil, una persona que se volvía pequeña, una persona fácil de corromper, de destruir. Cualquiera que se lo proponga podría aplastarlo con su mano, porque esa era la realidad, JiMin era como una pequeña flor, fácil y accesible de destruir, tal como una flor con sus raíces.
Era tan difícil arreglarlo, dejar que florezca muchas veces le era tan complicado y muchas otras le era tan fácil.

Tal vez desde el principio debió ser más rudo con todo, dejar que JiMin crezca por sí solo fue quizás el primer error de muchos. Pero era una realidad, JiMin tenía la edad suficiente para madurar solo pero no lo suficiente para volver a florecer. Así es como lo veía, no podía retenerlo como a un niño en desarrollo, pero podía cuidarlo hasta que sus pétalos vuelvan fuertes a su rosa.

Pero incluso con todo eso él no podía dejar de pensar tanto, solo quería verlo bien, solo quería que su corazón se sienta listo para volver a vivir. Y por eso, solo por eso, tal vez debía soltarlo un poco. Deseaba solo su felicidad, y si Yoongi representaba un poco de eso lo quería de vuelta.

Entonces ahí estaban, ambos viendo como sus ojos eran tan desafiantes e intimidantes pero no sintiendo más que un cariño rencoroso sobre él contrario. Yoongi también se sentía así, TaeHyung es el pilar del que JiMin se sostiene y sobrevive, pero al mismo tiempo el la pared que los separa a ambos.

En algún momento TaeHyung solo decidió que debían hablar, y caminó hasta él, frenando en su puerta y susurrando cosas que solo él entendía y sabía. luego solo cruzó a su habitación, lo vio perdido y después se vieron a los ojos. Yoongi supo a que venía, sus vellos se erizaron un poco, TaeHyung lo intimidó con su postura tan firme y dominante.  Ambos eran así, ambos eran tan iguales que se asustaban pocas veces. Que ambos tengan el carácter igual los chocaba como personas, pero a pesar de eso eran amigos.

—Entonces –Es lo primero que dice, después de casi veinte minutos de una batalla inexistente. Mientras los sofás bajo sus cuerpos no hacen más que aplastarse bajo el peso de ambos.

—Entonces… –le sigue TaeHyung, pero no sabe cómo seguir con eso. Piensa que tal vez todo es un error y que lo está volviendo a hacer, está a punto de volver a equivocarse de pie para después caer nuevamente en la decisión equivocada.
Piensa en irse, en buscar otra solución para arreglar otra vez a JiMin.

Pero entonces vuelve a Yoongi, a sus ojos oscuros que tanta tristeza le muestran y cae de nuevo en la realidad. Yoongi también es su amigo, y él ha sido de ayuda para destruirlo, el dolor cae en él y se arrepiente de muchas cosas en ese momento.
El egoísmo que una vez se apoderó de él ahora es arrepentimiento que toma su pecho de una forma tan dolorosa como no lo habría pensado nunca.

Era la verdad,  ellos también eran amigos y él solo se dedico a darle la espalda, dejó que la lluvia lo enferme y que el frío de la noche lo invada. Así lo sentía, Yoongi estuvo solo todo ese tiempo. Por un momento se engañó a sí mismo, quería llorar, pero sabía que debía ser más fuerte que el rapero en ese momento.
Entonces no lo pensó mucho, en ese momento aquello era lo que estaba bien. Se abrazo de las nada a yoongi, lo sintió tensar y luego solo se volvió un dulce a su tacto.

YoonGi no sabía lo que sucedía, su cuerpo de repente se sintió duro y luego cálido, sintió como todo el peso que sostenía desaparecía un poco. Mientras la oscuridad que lo comía desaparecía de sus alrededores. Se sintió cálido, querido nuevamente. Por primera vez en semanas sentía que alguien no estaba contra él, que lo querían reparar un poco, que alguien deseaba sostener su mundo de rosas rotas por un momento y curar sus manos tan heridas.
Lloró, fue lo único que hizo en ese momento. Se sentía coló un niño pequeño que acababa de recuperar a su madre.

TaeHyung lo sintió liberar todo, en su hombro, como un verdadero amigo y de pronto todo estaba tan bien como antes.

—Lo siento –fue tan bajo, TaeHyung derramó también sus lágrimas y se prometió a sí mismo no volver a hacerlo. No abandonar a un amigo, no quería volver a ser tan mezquino.

Duraron tanto en aquella situación, tanto que Yoongi se vio dormido una hora después. Todavía abrazado al cuerpo de TaeHyung y sintiéndose tan seguro de todo, como si todo fuera lo mismo que antes. TaeHyung pensó mucho sobre aquello, sobre todo en general, mientras se ocupaba de ser el escudo de Yoongi esa noche.
Se permitió dormir junto a él, Yoongi se lo agradeció, estaba seguro, siendo un niño roto solo por un rato para luego volver al mundo oscuro que le pertenecía, pero ahora las cosas eran así y él quería estar así tan solo un rato más.

—Realmente lo amo –Tan lento, un susurro invisible que TaeHyung pudo escuchar.

TaeHyung lo sabía, se negaba completamente pero así era.

—Lo sé, por eso venía –Taehyung ahora entendía muchas cosas, pero no lo entendía todo.

—Quiero hablar de eso –yoongi estaba tan escondido en su pecho, él era un gatito asustado en ese momento. Kim solo quería que él descanse un tiempo, tendrían todo el día siguiente para hablar de eso y le prometía no volver a dejarlo solo.

—Ahora descansa, Hyung.

Tal vez Yoongi sintió que su alma se llenaba de calidez, se dejó de descansar en los brazos del más alto por esa noche. Fingir que nada había pasado, que todo era como antes y que su vida era de un color tan rosa como las mejillas de JiMin. Aquel calor que le faltó tanto tiempo, el apoyo que no sentía ahora lo tenía, tan caliente y dulce delirando solo por él.

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SIN        EDITAR
NADA DE NADA

D      O      L       Y

Ya quiero que termine 😭

2306:
Daisies- Katty Perry
Watermelom sugar- Harry Styles
Rain on me- lady Gaga ft Ariana Grande
Filling- Trevor Daniel
Supaloney- BENEE ft Gus Dapperton

Xd esperó haber escrito todo bien je

después de veinte besos • 𝐘𝐎𝐎𝐍𝐌𝐈𝐍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora