𝗗𝗢𝗖𝗘

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El amor por las fiestas era algo que Isis y Luke tenían en común, así que por qué no, compartir también aquello. Los amigos de Luke solían moverse mucho en los ambientes de fiestas nocturnas, ese no era tanto el caso de las amigas de Isis. En su caso, la única que la acompañaba en sus aventuras nocturnas era Gina, amaba tanto las fiestas como ella, mientras que Blair y Victoria eran mucho más caseras, disfrutaban más de noches de películas o fiestas de pijamas. Aunque claro que, salían de fiesta y cuando lo hacían, eran un gran combo imparable, no lo hacían con tanta frecuencia. Cuando Isis les comentó el plan que le había propuesto su bomboncito australiano, únicamente Gina quiso sumarse, así que saldrían junto al grupo de amigos de Luke.

La integrante de Little Mix ya conocía a todos los amigos de Luke, al menos los más importantes para él, ya que todos estuvieron en su fiesta de cumpleaños. Isis le había caído bien a todos aquella noche, así que no tuvieron ningún problema en que ella y Gina se sumaran a su noche.
Como en el cumpleaños del rubio, fueron a un club nocturno poco reconocido y transitado, para que no se les molestase demasiado y pudieran tener una velada agradable.

El gran grupo llegó, todos pidieron algunas bebidas para comenzar a tomar algo, el grupo hizo una gran división, unos en la pista de baile y otros en uno de los sillones conversando a medida que bebían sus cócteles. Isis formaba parte del grupo de baile y Luke por otra parte estaba en el sofá de cuero negro charlando, aunque de vez en cuando desviaba su mirada hasta la pista, buscando a la chica de piel morena y ojos castaños. Su segundo cóctel vino rápido y también el tercero. Para cuando iba por el cuarto estaba comenzando a sentir esa felicidad y falta de vergüenza como para aproximarse a la pista de baile. 


A mucha gente podía llegar a sorprenderle que Luke fuera alguien tímido a la hora de bailar en público, sobretodo teniendo en cuenta que se dedicaba a la industria del entretenimiento y ya había hecho el ridículo bailando frente a millones de personas, se había sentido bien. Pero era distinto, porque sabía que esas personas sentían cierto amor o admiración por él, en cambio hacerlo frente a desconocidos era algo que le imponía. 


Por suerte, su vergüenza comenzaba a desaparecer a medida que el porcentaje de alcohol en su organismo aumentaba, en este preciso momento era lo que estaba sucediendo.

Isis lo tomó de la mano al verlo aproximarse, para tirar de él y que se uniese al grupo, lo estaban pasando muy bien y no entendía por qué había estado tanto tiempo ahí sentado perdiéndose la diversión, aunque desconocía la vergüenza de su amigo y estaba lejos de imaginar algo así.
Y eso fue lo que hicieron, pasarlo bien. Reír, bromear, bailar, beber. Quizás Luke abusó más de lo último, porque en cierto punto de la noche, ya se tambaleaba un poco.

Estaba mareado, algo aturdido por las luces del lugar pero aún así se sentía genial, con mucha energía y capaz de todo. Isis le prohibió beber más, estaba ya bastante ebrio y no quería que fuera a peor.

—Isis, dame aunque sea de tu bebida rogaba. —Sólo un poquito.

— No.- sentenció.— Ya has bebido suficiente por hoy, mañana me lo agradecerás

— No seas aguafiestas.— El rubio rodeó su cintura y la miraba fijamente a los ojos, tratando de lograr convencerla.

—No lo vas a conseguir — advirtió.—

— ¿Ni con un beso? — Estaba haciendo todo lo que se le ocurría para convencerla. Quería alcohol y también besarla. Extrañaba la sensación de besar a Isis, tanto que le daba igual arriesgarse a que alguien les hiciera una foto.

—Ni por esas .— volvió a negarse la cantante británica.

— Bueno, me apetece besarte igual — no esperó ninguna respuesta antes de atraer el rostro de Isis al suyo para poder estampar sus labios contra los de la muchacha.

𝐆𝐨𝐫𝐠𝐞𝐨𝐮𝐬 || 𝗟𝘂𝗸𝗲 𝗛𝗲𝗺𝗺𝗶𝗻𝗴𝘀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora