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- ¡DÉJALA!

El repentino grito de la muchacha lo hizo perder el control del volante por unos segundos, el vehículo se sacudió por unos momentos antes de estabilizarse. El conductor suspiró aliviado.

- Casi haces que nos matemos - le dio una mirada de muerte a su acompañante, pero esta, totalmente inmune desde siempre a sus expresiones amenazantes lo ignoró.

Subió el volumen de la música que salía de la radio de la furgoneta hippie, ya sabes, de esas minivan color verde agua. Empezó a hacer gestos exagerados mientras articulaba con su boca la letra de la música

Oh, ella es dulce pero una psicópata, un poco psicópata. Por la noche ella grita "Estoy fuera de mi-mi-mi de mi mente"

Volteó a ver al chico mientras seguía cantando

Mira, alguien dijo "no bebas sus posiones" . Ella besará tu cuello, sin emociones. Cuando ella es mala sabes que te encanta.

Se inclinó para darle un tierno beso en el cuello pero la cara de perros seguía en su lugar, aún estaba resentido por lo de la distracción.

Porque ella sabe tan dulce, no lo recubras con azúcar. No, no....

Movía sus hombros al ritmo de la música con una sonrisa enorme en la cara. El varón comenzaba a querer sonreír con ella, pero resistió apenas el impulso apretando sus labios.

Tu seguirás la corriente, deja que te guíe, guíe, guíe...

Picaba con sus dedos el costado de él, esperando que cantara con ella. Se acercó más y cantó suave en su oído:

- Tu dirás, "No, no.."

-Luego diciendo "Si, si, si" - ella soltó un grito de júbilo - porque ella se está metiendo en tu cabeza - concluyó Jay, mirando de reojo con una sonrisa a su chica.

Sacó la mitad del cuerpo por la ventana del vehículo cantando a todo pulmón

Oh, ella es dulce pero una psicópata, un poco psicópata. Por la noche ella grita "estoy fuera de mi-mi-mi de mi mente". Oh, ella es sexy pero una psicópata, asi que ella se fue pero está bien. Por la noche ella grita "estoy fuera de mi-mi-mi de mi mente"

Jay se carcajeó. Amo a esta chica, pensó con cariño. Se había enamorado de su locura desde que eran niños, no literalmente, se refería a la capacidad que ella tenía para atraer a una persona, de hacerla reír y llorar a la vez. Pero él era afortunado, Lís no se mostraba así con los demás, debían ganárselo, y estaba felíz de ser la única persona con la que se comportaba como en realidad era.

Joder, no entendía por qué los demás la juzgaban por las cosas que habían hecho otras personas. Era inconcebible.

Un recuerdo de la niñez invadió su mente

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