zeița zorilor • Kamigami no Asobi•

⸙͎INTRODUCTION

↝𝔑𝔞𝔯𝔯𝔞𝔡𝔬𝔯 𝔬𝔪𝔫𝔦𝔰𝔠𝔦𝔢𝔫𝔱𝔢↝

Eos estaba furiosa, no furiosa ¡Furiosísima! ¿Qué se creía ese Zeus? Molestarla en época de primavera. No era la primera vez que Zeus la llamaba para un pequeño favor ¡Pero ese favor pedido era enorme!

-Pft. - Re sopla la diosa. - Pidiendo que sea guía de una humana, claro que sí. -Hablaba con un tono sarcástico y enojón.

-No es un favor Eos, es una orden. -La gruesa y firme voz de Zeus resuena por todo el Olimpo.

-No lo haré. -La voz decidida de Eos hace que la cara de Zeus cambie a una sonrisa.

-No te estoy pidiendo permiso. - Zeus se levanta de su gran trono y hace a un lado a las ninfas que lo estaban alimentando. -Es una orden. - Finaliza agarrándola del mentón, una sonrisa juguetona se posó en sus labios. -La linda humana esta haciendo bien su trabajo, pero no es suficiente.

-¿Tan aburrido estás? -Eos se suelta de su agarre y luego se acomoda el cabello para atrás. -Estoy ocupada ¿Quién hará el trabajo por mi? Sabes que Helios esta insoportable, nadie más que yo lo escucha.

-Sé que también no la pasas bien últimamente gracias a... Afrodita. -Eos escuchó nombrar a la diosa de la belleza y quiso vomitar frente a Zeus. Zeus notó el desagrado en la cara de Eos y sonrió. -Encontraré a alguien que te reemplace, depende de tí cuánto durará lo que enseñes.

-No la nombres en mi presencia Zeus. -Frunció en ceño y luego movía su pie de arriba para abajo. Cerró los ojos y colocó su dedo en el su frente. - Bien, lo haré.

Zeus sonrió triunfante como siempre y luego ordenó traer una pequeña vincha de flores, para que Eos lo usé.
Ella lo miró confundida y Zeus habló:

-Es una especie de amuleto de la suerte. -Mintió. Claramente no le iba a decir que esa pequeña vincha iba a reprimir la fuerza y poderes que tenía. -Te hará humana, no le des mucha importancia.
Bien, primero que nada te deseo la mejor de la suerte.

-No sé qué tengo que hacer. ¿Veo tutoriales de cómo es el comportamiento humano? -Le comentó la chica, ya se estaba arrepintiendo de lo que iba hacer.

-Pídele ayuda a la humana. -Zeus abrió un portal y la empujó sobre él. -Buena suerte belleza.

Antes de que Eos abra la boca, ya había caído en un gran descampado lleno de flores de todo tipo.

-Me recuerda a Deméter. -Dice levantándose del suelo.

El campo era verde puro, parecía mentira de lo realmente bello que era todo.
«Esto está alejado de la realidad humana, estúpido Zeus»
Caminó varios pasos largos hasta quedar enfrente de lo que seria la escuela. Chocó con varios espíritus creados por Zeus y luego entró a lo que sería la dirección.

- Aquí no hay nadie. -Suspiró cansada.

- Modales los tuyos. -La voz de un hombre hace que se de vuelta y luego mire para arriba. - Me imagino que debes ser Aurora o Eos, Zeus me comentó de tí.

- No esperaba ver a dioses egipcios aquí. -Dice sentándose en la silla de visitante. - ¿Eres el perro de ese ser asqueroso?