Consejos para escribir

19. Los ejercicios

Para escribir un libro no solo basta con escribir un libro igual que para correr una maratón no basta con ello, hay que entrenar, que hacer pequeños ejercicios que nos ayuden a rendir más a la hora de la verdad.

Yo hago  ejercicios de escritura cuando quiero mejorar mi escritura antes de ponerme seriamente a escribir un libro, cuando estoy pasando por un bloqueo y no quiero dejar de escribir para no desgastarme o cuando me apetece escribir, pero no me apetece escribir ninguna de las historias que estoy haciendo en el momento. Puede que tú quieras hacer estos ejercicos en otras situaciones, por ejemplo, uno al día para ir practicando, y eso está bien, cada persona es un mundo.

Hay cientos y cientos de ejercicios de escritura que existen (si buscas por google verás muchísimas ideas), pero los que a mí mejor me funcionan son estos:

-Reescribe fragmentos de libros: lo que yo hago es tomar un fragmento (una página, un párrafo, etc) de mis libros favoritos y lo reescribo cambiando o bien el género o bien la extensión. Por ejemplo, intento hacer de una escena romántica una terrorífica o de una escena de acción, una aburrida o, si no quiero cambiar el género, tomo una escena detalladísma y la simplifico (eso me ayuda mucho para ser sintética y no sobrecargar mis textos o no repetirme) o tomo una escena muy simple y la lleno de descripciones detalladas (para cuando yo deba detallar algo en mis libros)

-Escríbete a ti: si te ha pasado algo emocionante, algo sorprendente, algo inusual o aterrador o quizá algo que te ha enfadado ¡Escríbelo como si fuese parte de un libro! Al escribir una vivencia personal de forma literaria eso te ayudará a naturalizar más lo que tu escribas o a escribir escenas más cotidianas.

-Escribe un diálogo o una pelea posible: ¿Te gustaría hablar de un tema con alguien? ¿Te da rabia no haber dicho esa respuesta tan ingeniosa cuando discutías con alguien? Puedes escribir diálogos inventados en tu mente, sin demasiado contexto, porque así cuando escribas un libro los diálogos de los personajes parecerán más naturales, más humanos, más fluidos

-Véndate los ojos y describe. Muchas veces tenemos a describir solo las características visuales del mundo que rodea a nuestros personajes, pero los tactos, los olores, los sabores, las temperaturas, tonos de voz, etc... importan mucho, así que si estabas describiendo, no sé, una manzana, prueba a describirla pero como si tuvieses los ojos tapados.

Ojalá os haya servido <3