Capítulo 1

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Mi novio es un tonto le he dicho muchas veces que no tiene que esforzarse tanto que puedo ayudarlo también con los gastos de la casa, pero no el sigue con "Tu solo estudia" y gracias a eso el cogió un resfriado, sé que todo lo que hace es por mí y eso me hace muy feliz pero también quiero ayudar, antes pues bien déjenme contarle nuestra historia.

Cuando lo conocí estaba en mi primer año del colegio el era conocido como "Un busca pleitos" pero tenia una cantidad de fans debido a su rostro hermoso y un cuerpo magnífico, era el típico chico que no llegaba a clases a tiempo se pasaba fastidiando a los demás y nunca seguía las reglas, pues yo era todo lo contrario un chico correcto que trataba de ser lo mejor además tenía que ser el ejemplo porque yo era el presidente del consejo estudiantil.

Un día me quedé mas tiempo en el colegio debido a que mis profesores me pidieron que ayudará en la organización del evento que se llevarán a cabo en la semana, cuando termine de hacerlo ya era más de 06:30 pm, como mis padres nunca están en casa no tenía problemas, recogí mis cosas y me fui a tomar el bus pero antes pasé por algo de comer, conociendo a mi mamá me habrá dejado dinero sobre la mesa para comprar algo de comida, llegue a un local que parecía un pequeño restaurante mis compañeros me dijeron que este lugar servía buena comida así que decidí probar, al entrar me pareció muy llamativo el lugar había mucha más gente de lo que me esperaba, me senté en una de las mesas que estaba en el medio.

—Que desea orden—Me dijo una chica con una sonrisa encantadora su rostro se me hacía familiar.

—Quisiera ravioles con salsa blanca y un zumo de naranja— Amo la pastas y nada mejor que pastas caseras.

—Muy bien se lo traeremos enseguida.

Para pasar el rato revise mis grupos de WhatsApp pero como siempre solo decían tonterías y me uní también a su plática para nada productiva pero bastante divertida, me metí mucho en la conversación que no me percate que ya habían pasado como 45 minutos y mi orden aún no estaba, cuando estaba a punto de ir a quejarme se acerca un camarero.

—Lamento la tardanza uno de los cocineros se puso mal de repente así que quedamos cortos de personal pero aquí está su orden como disculpa puede elegir el postre gratis—Decía todo eso mientras iba colocando el plato sobre la mesa junto con el zumo con una especial habilidad.

Levante la cabeza para mirarle y darle las gracias me quedé en shock al ver que ese camarero amable y atento se trataba de el "busca pleitos" Edward Silver.

—Mire nada más quién diría que el presidente del consejo estudiantil Erick Golden estaría aquí, me gustaría quedarme a charlar pero como te he dicho estamos cortos de personal.

—Y quién diría que un delincuente como tú trabajara.

—Tienes un buen sentido del humor, pero no me queda de otra es el negocio familiar así que tengo que ayudar, bueno cuando termines hazlo saber a aquella chica para elegir el postre— señaló a la chica que tomo mi pedido— Que por cierto es mi hermana.

Dijo eso y se marchó, ahora sabía el porque me resultaba familiar aquella chica, deje de lado eso y me quede viendo los ravioles tome los cubiertos para comenzar a comer.

—Pues aún no has comido acaso haces algún tipo de rito o algo así no te preocupes no he puesto nada en tu comida— Soltó una pequeña risa y coloco enfrente mío una pequeña cesta con pan.

—Yo no he pedido esto.

Estiro la silla que estaba al otro extremo de la mesa y se sentó en ella.

—Mi madre le pareció extraño el que me quede hablando con un cliente y le dije que eras mi compañero o algo así, en fin ella insistió para que venga a charlar contigo, no traigo amigos a casa y le pareció una buena oportunidad para que vea que tipo de amistades tengo.

—Si ella supiera— Susurré — así que por eso es el pan— señale la cesta.

—Mmm la verdad no, he probado una nueva receta de pan de ajo y me pareció una buena oportunidad para que alguien que no sea mi familia lo pruebe.

—Si tú lo hiciste no gracias— tome el tenedor y tome algunos ravioles, no podía creerlo estaba completamente delicioso, el sabor era indescriptible—esto está delicioso.

—En verdad no hacía falta decirlo la expresión en tus ojos lo dicen— rió, tomó el pan y lo partió por la mitad—Toma no te hará mal en verdad quiero que lo pruebes.

Ya que insistía tanto no podía rechazarlo nuevamente, tome el pan y lo probé, esta vez sentí como las lágrimas por mi mejilla.

—Oye estás bien— Me dijo Edward con una expresión de preocupación—lo lamento no pensé que sabría tan mal, toma una servilleta.

—Gracias pero no es eso está delicioso, es solo que nunca más pese en probar un sabor igual de alguna manera sentí como si volviera a mi infancia—El pan que preparaba mi nana tenía el mismo sabor.

—Menos mal, pensé que estaba tan mal que hasta lloraste— sonrió ligeramente.

Cuando termine de comer seguimos hablando, el parecía una persona mucho más interesante de lo que me esperaba, me había contado como había aprendido a cocinar y cómo fue su primera vez haciéndolo sin ayuda de nadie.

—Una vez encontré una receta en Internet de cómo hacer un trago exótico de una mezcla de varios licores, adivina quién se fue hospitalizado y quedo encerrado en el baño como una semana

—Creo que nunca seguiré una receta de Internet.

—La receta no es el problema estaba bien, más bien yo pensé que sería buena idea que sea exótico.

—Ósea que...

—Así mismo le puse otra mezcla de tragos, pensé en ese entonces que no había problemas si unía varios.

—Me sorprende que estés vivo— me percate que el local estaba quedando vacío ví la hora en mi móvil y ¡Madre mía! Ya eran las 9:14 pm, no me di cuenta de que tanto hablamos.

—Bueno será mejor que me retiré ya es tarde y tendré que ir en taxi ya que el último bus que me lleva a casa termino hace una hora.

—No quieres quedarte en mi casa.

—No gracias, no quiero causar inconvenientes a tu familia.

—Para nada a ellos le encanta que te quedes —Tomo mi mano y prácticamente me arrastro hasta donde estaba sus padres— Mamá Papá, mi amigo perdió el último bus a causa mía ¿Podría quedarse en casa hoy?

—Por supuesto siempre y cuando sus padres lo permitan— Me dijo con una linda sonrisa.

Sus padres parecían muy jóvenes me atrevería a decir que se ven más como su hermanos mayores su mamá tenía un lindo cabello color marrón con unos lindos risos y su padre no lucia para nada como me lo imaginaba era muy amable.

Nuestra Historia   [ Completa ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora