-hay una lagrima-

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–Todo está bien, está despertando, sería mejor esperar unos minutos. Le diré cuando puedan pasar.– la enfermera encargada de SeokJin me sonrió tranquilamente alejándose luego.

Suspiré aceptando aquello, unos minutos más. Song se encontraba hablando con las autoridades del hospital al que nos habían llevado para indicarles la situación de Jin y poder pasarlo a su consultorio, mientras tanto Yoongi consolaba a su novio en un rincón de la sala, Jimin, quién se sentía culpable todavía me miraba apenado desde su lugar. Aparte la vista volviendo hacía Hoseok, mi amigo, el chico que me ocultó la identidad de la madre de Kim SeokJin por quién sabe cuánto tiempo. Fruncí el ceño llamando su atención.

–¿Piensas hablar en algún momento o fingiras que lo que me dijiste nunca pasó?– me senté a su lado clavando la vista en sus ojos, suspiró lentamente acomodándose en su lugar con nerviosismo.

–Yo no te quise mentir, ¿bien? Aquí soy tu aliado, no tú enemigo, así que deja de mirarme así.– peino su cabello tomando luego su celular.– Cuándo leímos la carta de Jin decidí tomar cartas en el asunto, mi tío el policía me ayudó, tuve que rogarle por días para que accediera a buscarla.

–¿Por qué no me dijiste?

–¿Para qué? Ya tenías suficiente con cuidarlo y llevarlo a sus sesiones, te estaba cuidando.– acarició mi hombro.– Tu, yo, y todos los lectores sabemos que algo está mal en tu cabeza.

–Deja de decir tonterías.– rodé los ojos tomando su móvil, la foto de una mujer mayor relucía en la pantalla, con una sonrisa encantadora y la mirada brillante, en el pie de la pantalla estaba su nombre. Kim Ha Soo.– Ella es...

–Su madre, sí. Mi tío la encontró, pero no estaba aquí, de hecho, no estaba en ningún lado.– cambió la foto y me mostró de nuevo la pantalla, se veía diferente.– Estaba escapando, no sé de que, no me lo quiso decir. Fuí en su búsqueda, esos días que "fui a visitar a mi madre" en realidad estuve viajando. Todos mis ahorros están en la basura, la mujer andaba de Daegu, a Ilsan, a Suwon, a Gonyang... Bueno, resumiendo, la pude encontrar en la ciudad de Jeju.

–¿Cómo sabías que estaba allá?

–A cada lugar que llegaba tenía que mostrarle la orden de arresto para ella, obviamente falsa, tuve que pagarle a mi tío mucho dinero para que me diera eso.– rodó los ojos.– El último lugar que visitó fue ese. En cuento la encontré y le dije lo de SeokJin me golpeó muy fuerte, creo que ya no puedo tener hijos.

–Ve al punto, Jung. A nadie le interesan tus bolas.– sacudí sus hombros notando la cercanía de Jimin y Yoongi a ambos, quienes nos habían oído hablar de la misteriosa mujer en el centro comercial.

–Encima que me sacrifico por ustedes. La señora Kim aceptó escucharme y volver, pero en cuanto bajamos del taxi me golpeó de nuevo y salió corriendo, finalmente perdí rastro alguno y me di por vencido. No quise decirles porque en realidad no logré nada, ella estaba en perfecto estado y lo único que me confesó fue su dolor hacía el accidente.– suspiró profundamente mirando apenado.– Cuando la ví en el centro, después del desmayo de Jin, le dije que tenía que venir con nosotros, pero se negó y dijo que... Qué SeokJin ya no era asunto suyo.

–Que hija de...

–Yoongi...– susurró Jimin regañándolo.– ¿Por qué no le decimos a Jin? Digo, él sabía de su madre cuando llegó, la estaba buscando, sabe que está viva. ¿No?

–No.– froté mis ojos cansado de tanto.– La olvidó, cree que está muerta. Y no tuve la oportunidad para decirle... Más bien, el valor para decirle.

–Podemos explicarle.– intentó animarme abrazándome de lado.– Lo entenderá.

–¿Y si no?– acotó Hoseok.– ¿Y si sufre algún colapso?

–Solo fingamos que esto no pasó.– habló Yoongi por fin.– Vamos, SeokJin será lo más lindo que quieran pero es un distraído a mil, con unas sonrisas de Nam y unos abrazos de Jimin olvidará lo que sucedió.

Nos quedamos en silencio unos segundos. Tragué en seco escuchando la puerta tras nuestro abrirse, volteé y lo ví, SeokJin, con el rostro confundido salía a pasos lentos buscando con la mirada por toda la sala de espera hasta encontrar mi mirada, me levanté rápidamente ignorando el tema anterior de conversación. Casi corrí hasta su lado, tomé su mano y sonreí ligeramente.

–¿Estás bien?– cuestioné acariciando su rostro.– No deberías levantarte de la cama, vamos. Entra.

–Nam... Y-yo la ví.– susurró soltando mi mano.– La ví y me sonrió. Me sonrió como antes y... Cuando me acerqué ella retrocedió, Nam. Me... Me dijo que no me acerque, m-me, me dejó otra vez... Nam, Nam... Ella está viva, ¿Esta viva?

–Creo que debemos tener una sesión real ahora.– Una tercera voz interrumpió sus preguntas.– Kim SeokJin, es hora de decirte la verdad.

–Song.– volteé frunciendo el ceño.– Usted dijo...

–Todo se fue a la mierda, NamJoon. No podemos ocultarle nada, no hay forma. Vamos, hay una ambulancia esperando afuera.











(***)

Chan... Bah, ya todos sabíamos que lo dejaría así.

Falta el último capítulo de este fic... Se llamará -de dolor- completando así la frase "Detrás de una sonrisa hay una lágrima de dolor" chequense ese talentaso.

Fue un gusto leerlas por tanto tiempo, pero esto... Es mentira.

HAY FIC PARA RATO.

Quería decirles algo así para que se enojen un poco digo, son puro amor ustedes, siempre que leo las autoras están como "respeten, no sean groseros, dejaré de escribir por su culpa" y yo aquí nadando en amor.

Las ano. JAJAJ perdón, se me quedó. Incluso a los ojitos que no dan estrellas, a ustedes los amo/odio. :) Y a los que comentan,  uffff UFFFF... ME TIENEN EN SUS MANOS.

Nos leemos
<3

¡Solo tiene 7 años! [NamJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora