DÍA 5

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Las cámaras de seguridad que estratégicamente estaban puestas por todo Karmaland se encontraban grabando todo lo que podían en búsqueda de los rebeldes que aún quedaban. 

El lugar debía ser limpiado y nadie, pero absolutamente nadie podía faltar. 

Por eso las personas encargadas de revisar el material grabado debían enfocarse en buscar a los más importantes, a lo que necesitaban sin falta. 

- ¿Lo tienen? - preguntó aquella persona observando las cámaras de seguridad. 

- Lo tenemos todo listo, solo hay que esperar a que caiga - dijo uno de los operadores de aquel lugar.

con sumo cuidado, todos los ojos de aquella sala se encontraban en las pantallas que mostraban diferentes puntos de Karmaland y de las personas que se encontraban en los alrededores. 

De pronto en aquella pantalla apareció uno de ellos. 

Uno de los 9 elegidos. 

Borja Luzuriaga se veía corriendo por medio del bosque, totalmente asustado mientras miraba en todas direcciones buscando un lugar seguro. Estaba solo y aún no había dado con ninguno de sus amigos, aquello lo tenía nervioso sin dudas ya que sabía que había gente que intentaba matarlos. 

El mismo había sido testigo de aquello, con escopeta en mano algunos hombres estaban tras el cazándolo como si de un animal se tratase. 

No sabía exactamente qué era lo que estaba ocurriendo, pero si sabía que había alguien detrás de todo esto, y esa persona se encontraba ahí mismo, detrás de una pantalla viendo como el corría a través de lo que solía ser Karmaland. 

No era coincidencia que aquellas bombas o lo que fuera que haya sido aquello, hayan caído aquel día, justo en el "día libre" de los héroes, justo cuando todos estaban con la guardia baja y disfrutando del día. Los nueve habían estado distraídos con otras cosas por lo que era el momento perfecto para lanzar esas cosas y destruir todo Karmaland de paso.

Hace unos días se había avistado a Borja intentado acercase al poblado, pero este dio media vuelta rápidamente cuando se encontró con un alto muro que cubría gran parte de todo Karmaland y por lo que había averiguado observando un momento el portón de acceso era que podías entrar de dos formas.

O siendo un guardia o una vez eras cazado por esos tipos vestidos de manera extraña.

Habían sido días duros en los que le había costado encontrar comida y sobre todo, aún sentía aquella opresión en su pecho.

Había visto a Raúl morir frente a sus propios ojos y aún no se recuperaba de aquel shock.

Las bombas habían caído justo cuando estaban separados y una vez estas cayeron no pudo ver a su novio hasta que el humo de disipó un poco.
Cuando corrió hacía el ya era demasiado tarde, Auron no tenía pulso y tampoco reaccionaba a nada.

Aquello lo destrozó por dentro y con un nudo en la garganta se apresuró a buscar ayuda, pero todo era un caos y jamás pudo encontrar a nadie. 

Como si a todos se los hubiera tragado la tierra.

Cuando quiso volver dónde estaba Raúl, su cuerpo ya no se encontraba dónde lo había dejado dejando a Borja sumamente confuso con lo que estaba ocurriendo. 

Ese fue el primer día en que "los cazadores" como les había apodado a esas personas comenzaron a perseguirlo y desde ese entonces solo había sabido correr y esconderse dónde podía.

- Ahora - se escuchó decir a aquella persona vestida de traje. 

Justo en esos momentos se pudo ver a través de las cámaras como Borja se detenía de golpe y comenzaba a girar su cabeza para observar mejor todo el ambiente. 

Con cuidado se acercó hasta una casa abandonada y en pésimas condiciones para encontrarse con algo que sin duda lo emocionó.

- Enciende la cámara del numero 7 - exigió la persona con traje al que controlaba las cámaras de seguridad. 

Una nueva imagen comenzó a ser proyectada en una de las pantallas mostrando la oscuridad de una tela negra semi transparente que dejaba ver un poco a través de ella. 

¡ALEX! – se escuchó desde aquella pantalla. 

Lo siguiente que pudo verse fue a Luzu quitando aquella tela permitiendo que todo comenzara a verse en primera persona, como si lo que alguien estuviera viendo y oyendo fuera transmitido directamente a aquella pantalla. 

Tranquilo, voy a sacarte de aquí – dijo Borja comenzando a desatar a alguien mientras luchaba con aquellas ataduras. 

Luego de desatar aquello, quitó otro paño más que también estaba interponiéndose en la imagen, como si alguien hubiera sido amordazado, al finalizar con su tarea sonrió. 

Pero aquel gesto no duró demasiado ya que un disparo se escuchó a lo lejos llamando la atención de Borja quien se giró para ver que estaba sucediendo. 

Es mejor que vengas por las buenas salvaje – se escuchó como si la cámara estuviera hablando. 

Un sin fin de pisadas comenzaron a escucharse a lo lejos, y como estas se acercaban a paso acelerado hasta donde el se encontraban. 

¡¿Que has hecho?! – dijo Luzu observando nuevamente a la cámara con enojo. 

A pesar de eso y sin esperar a que leyeran sus movimientos Borja salió corriendo de aquella casa como si su vida dependiera de ello. 

- ¡QUE NO SE ESCAPE! - ordenó la persona con traje en aquella sala a un intercomunicador que traía en su mano - Traigan al numero 3, lo necesito, Vivo o muerto

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EL MURO // RUBEGETTA AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora