Nuestra Querida Casera (Final Fantasy/Kingdom Hearts) (NSFW/Lemon)

Capítulo 13

"Saïx ..." Lady lo llamó suavemente, los ruidos de la habitación parecían los de un animal rabioso revoloteando. La puerta estaba abierta de par en par y Lady sólo podía ver una pequeña parte de la habitación que estaba iluminada por la luz de la luna que venía de la ventana. Desde la oscuridad, dos profundos ojos de color naranja dorado la miraron desde adentro.
Su respiración se volvió desigual mientras se alejaba lentamente: su adrenalina comenzó a dispararse rápidamente, contando la  cantidad de pasos que tomaría correr hacia la puerta.

Saïx salió de la habitación oscura, un aura dorada que rodeaba su figura y sus ojos brillaban intensamente en la oscuridad. La cicatriz en su frente parecía más grande y más irregular que la última que vio, y sus dientes se afilaron hasta convertirse en unos parecidos a un lobo salvaje.

Antes de que ella pudiera moverse hacia la puerta, él corrió hacia ella para agarrarla por los hombros y golpearla contra la pared. El aliento abandonó sus pulmones y jadeó para intentar recuperarlo. Sus uñas se clavaron en los brazos que la sostenían y la sangre que brotó de sus rasguños sólo pareció excitarlo aún más cuando sus ojos brillaron más intensamente.

Ella le dio una patada en la espinilla y lo derribó al suelo"¡¿Que te pasa?! ¡Despierta" Lady le gritó cuando él gruñó y la agarró por las caderas; sus garras se clavaron en su piel y la hicieron estremecerse de dolor. Levantando las caderas, la arrojó a un lado con el impulso y la hizo rodar hacia dejando acostada sobre su estómago,  atrapando sus manos con una sola. Saïx se inclinó y gruñó en su oído mientras su otra mano comenzó a rasguñar lentamente su espalda, "Algo me atrae a ti...¿Qué podría ser?" Se lamió los labios, tomando uno de los dedos donde las manchas de sangre los teñían y se lo ponía en la boca. Lady luchó, con la cabeza hacia un lado donde solo podía ver la mitad de la cara enfurecida de Saïx. En el momento en que le lamió la sangre, también vio que sus pupilas se dilataban aún más.

Levantándola y arrojándola al sofá, este se deslizó hasta golpear la pared Lady agarró sus brazos, sintió los rasguños de sus afiladas garras y levantó la vista para ver al hombre enloquecido acercarse a ella. Él no perdió el tiempo en atacarla, un gruñido escapó de sus labios curvados y Lady vio cuán afilados estaban bajo el sutil resplandor de la luna. Instintivamente ella apuntó su puño directamente a su mandíbula y él ni siquiera se estremeció, su sonrisa se hizo más amplia cuando atrapó sus manos sobre su cabeza para sujetarla. En cualquier parte que agarrase, él la lastimaba, haciéndola sentir sangre en todas partes donde él la había arañado. Lo que sea que se le haya metido, hacía que sus movimientos fueran más rápidos, su fuerza y resistencia eran casi inhumanas. ¿Cuánto duraría? ¿y QUÉ era esto?.

Lady frunció el ceño mirando directamente a sus brillantes ojos. Era más bestia que hombre en estos momentos.

Movió sus piernas, intentó patearlo erróneamente pues Saïx la había detenido en plena acción. Envolvió su mano al rededor de su cintura y la atrajo hacia él, atrapándola entre su regazo, sujetando sus muñecas con una mano mientras que con la otra agarraba su muslo. Empujando hacia él, olió su cabello y Lady sintió cómo sus dientes rozaban su cuello tentativamente hasta llegar a la base de este, donde se une con el hombro, mordiéndola. Fuerte.

Lady abrió su boca para gritar de agonía, pero Saïx la calló,  poniendo su boca en la de ella. el metálico sabor a sangre fresca inundó su boca. Luchó lo más que pudo pero era como luchar contra la fuerte marea del océano.

Las garras de Saïx se clavaban en sus muslos mientras se inclinaba sobre su violento beso, si se le puede llamar así, y lleno de ira. Cuanto más luchaba contra él, más clavaba sus garras y mayor era la cantidad de sangre que perdía. Se sentía mareada.

Soltó sus labios y bajó lentamente por su cuello, llegando a la clavícula. Soltó su muslo para agarrar su cuello. La miró fijamente "Si gritas, te arrancaré la garganta."  Luego procedió a jalarla hacia adelante, llevó cuello hasta que su boca y la mordió una vez más. Lady cerró los ojos, las lágrimas brotaban mientras luchaba por no gritar cuando las puntas de sus uñas comenzaron a clavarse en la arteria de su cuello.